EL PRIMER HÉROE AVENTURERO
Hoy es aniversario natal del actor estadounidense Douglas Fairbanks, una de las primeras grandes estrellas del cine silente tanto en su país como internacionalmente, cuya carismática figura destacó, sobre todo, por sus películas de aventuras en los años 20. Fue asímismo miembro fundador de la Academia de Hollywood y presentador de la primera ceremonia de entrega de los Oscars en 1929. Se le conoció como "El Rey de Hollywood", título que, a su muerte, heredaría Clark Gable.
Semblanza biográfica a partir de la página El Criticón:
Actor de fino bigote y generosa sonrisa, encarnó en las pantallas mudas
al prototipo de héroe americano, defensor de las causas justas e
implacable persecutor de malvados y pérfidos villanos, ganándose el
afecto y simpatía de la millonaria audiencia estadounidense.
Como casi todos los protagonistas de la época llegó a Holllywood después
de pasar por Broadway, en donde interpretó con éxito desde principios
del siglo XX obras teatrales, entre ellas "The show shop".
En el año 1907 Douglas contrajo matrimonio con Anna Beth Sully, hija de un adinerado empresario con la que tuvo a su hijo Douglas Fairbanks Jr., luego actor asímismo.
Los logros escénicos del actor de Colorado no pasaron desapercibidos
para la emergente industria cinematográfica y David W. Griffith le
ofreció incorporarse en Triangle Films en el año 1915. Lamentablemente la asociación entre los dos no llegó a buen puerto, ya
que el gran director no supo aprovechar los recursos estelares que
atesoraba Fairbanks en títulos dirigidos por Christy Cabanne como El cordero (1915), película con guión de Griffith. A la vista de la escasa química entre ambos, Griffith puso al intérprete
en manos de la pareja formada por la guionista Anita Loos y el director
John Emerson, quienes debutaron con el nuevo protagonista con la comedia Su retrato en los periódicos (1916), consiguiendo un
importante triunfo comercial prorrogado con títulos como Aristocracia americana (1916), Wild and wooly (1917) y Reaching for the moon (1917). Douglas Fairbanks se había convertido ya en toda una celebridad, pero su
verdadera tipología (en esos momentos su caracterización era la de un
personaje aristocrático) vino determinada por su colaboración con el
director Allan Dwan, iniciada con The habit of happiness (1916) y continuada en otros como The good bad man (1916) o El moderno mosquetero (1917).
En 1916 Fairbanks conoció a la actriz Mary Pickford, con quien comenzó una relación sentimental que acabaría en boda cuatro años después tras el divorcio de Anna Beth. Ambos se unieron en 1917 a su amigo Charlie Chaplin para vender bonos de guerra cruzando todo el país. Pickford y Chaplin eran las estrellas mejor pagadas en Hollywood. Un año después, Fairbanks les igualó en popularidad. Los tres juntos fundaron (con D.W. Griffith) en 1919 la compañía United Artists a fin de controlar sus propios intereses sin depender de los todopoderosos estudios. El primer film producido por UA fue la comedia His Majesty, the American (1919), donde Fairbanks fue dirigido por Joseph Henabery. Tras los respectivos divorcios de sus parejas previas, Fairbanks y Pickford, ya unidos en matrimonio, se convirtieron en la primera pareja célebre de la meca del cine, se les consideró 'la realeza de Hollywood" y fueron muy famosas y publicitadas las míticas fiestas organizadas en su mansión Pickfair en Beverly Hills.
La primera película en la que Fairbanks daba rienda suelta a su característica
vivacidad aventurera y energía escénica fue La marca del Zorro (1920),
un film dirigido por Fred Niblo que propició con su éxito el
protagonismo de Fairbanks en diversos títulos de aventuras. Entre ellos Los tres Mosqueteros (1921) de Fred Niblo, Robin de los bosques (1922)
de Allan Dwan, El ladrón de Bagdad (1924) de Raoul
Walsh, El pirata negro (1926) de Albert Parker, o El Gaucho (1927) de F. Richard Jones. Con la llegada del sonoro Fairbanks y Pickford protagonizaron juntos La fierecilla domada (1929), que dirigió Sam Taylor adaptando la obra de Shakespeare. La fama del actor declinó en los años 30, retirándose del cine tras protagonizar La vida privada de Don Juan
(1934), una película de Alexander Korda coprotagonizada por Merle Oberon. Dos años después, en 1936, Fairbanks se divorció de Mary Pickford. El mismo año se casó con la showgirl Sylvia Ashley.
La marcha de Fairbanks supuso el adiós de un monstruo del cine, una
estrella de los años dorados de Hollywood que fue el eterno prototipo
del héroe de aventuras. Sus películas fueron posteriormente imitadas y
rehechas hasta la saciedad. Su hijo, Douglas Fairbanks, Jr., con un notable parecido físico a su
padre, continuó con éxito la senda interpretativa de su mítico
progenitor, participando también en películas de corte aventurero.
Fairbanks falleció de un infarto el 12 de diciembre de 1939. Tenía 56
años y dejaba viuda a su esposa Sylvia, quien se casó años después con Clark Gable.
Una semblanza bien interesante de una estrella antológica.
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