EL MEJOR FOTÓGRAFO DE GUERRA
Hoy se cumplen 60 años de la muerte del gran fotógrafo húngaro Robert Capa, a quien en París otro fotógrafo húngaro, André Kertész, le enseñó las posibilidades de la cámara Leica de 35 milímetros. Capa entendió que, por su tamaño, era práctica para llevar a manifestaciones y frentes de guerra, y así lo hizo, estableciendo las bases del moderno fotoperiodismo, ya convertido en una profesión respetada y seria, un trabajo del que se puede vivir. Como fotógrafo de guerra cubrió diferentes conflictos: la Guerra Civil Española, la Segunda Guerra Chino-Japonesa, la Segunda Guerra Mundial (en Londres, África del Norte, Italia, la Batalla de Normandía en la playa de Omaha y la liberación de París), la Guerra Árabe-Israelí de 1948 y la Primera Guerra de Indochina. Fue asímismo cofundador de la primera agencia de cooperación para fotógrafos independientes de todo el planeta. Robert Capa dejó un inestimable legado de 70.000 negativos, testimonio visual extraordinario reunido en tan sólo veintidós años de
carrera (1932-1954). Sus imágenes, además de documentar los
acontecimientos bélicos más importantes del siglo XX, se han convertido en
auténticos iconos de la lucha, de la resistencia y de la dignidad humana
frente al sufrimiento.
La siguiente semblanza está tomada (con algún retoque) de la página Biografías.es:
Este famoso fotógrafo, considerado como el más
importante corresponsal gráfico de guerra de todo el siglo XX, había
nacido en Budapest, Hungría, el 22 de octubre de 1913 y falleció en Thai
Binh, Vietnam, el 25 de mayo de 1954, al pisar inadvertidamente una
mina durante una expedición del ejército francés a quienes acompañaba
durante la Primera Guerra de Indochina, cuando la revista Life
lo convoca para remplazar a otro fotógrafo, que no estaba disponible en
el momento, mientras él estaba en Japón visitando a unos amigos. Su
nombre de pila era Endre Ernö Friedmann.
Provenía
de una familia judía con posibilidades económicas producidas por las
actividades de sus padres; su madre, diseñadora de moda y su padre un
pensador intelectual con influencias aristocráticas. Su apodo de Bandi
viene de esa época cuando se le colocó en el grupo al que pertenecía,
como era la costumbre en Hungría, ya fuera artístico o político.
Cuando
llega la depresión económica en 1929 y el taller de sus padres debe ser
instalado en la casa ante la pérdida del local que tenían, se ve
obligado literalmente a vivir vagando por las calles. En estas caminadas
conoce a una de las mujeres que más influiría en su vida, Eva Besno,
quien ya estaba interesada en la fotografía y quien consideraba que era
más productivo tomar fotografías que hacer los deberes escolares, por
lo que introduce al joven en este fascinante mundo.
Cuando tenía diecisiete años, mientras estaba por terminar su período
escolar, conoce a otra de las personas que sería determinante en la
vida de Endre, Lajos Kassák, quien con su pensamiento
socialista, orientaciones artísticas y apoyo económico apropiado apoyó a
varios artistas que representaban corrientes constructivistas y para
quien la fotografía era de importancia social porque plasmaba las
injusticias del sistema capitalista. Endre sale del país cuando ya tiene
18 años, en 1929, con una cantidad de jóvenes más que buscaban un
gobierno democrático y mayores garantías económicas, mientras que en
Hungría ya se había impuesto un gobierno de orientación fascista.
Se traslada a Alemania, pero sigue su viaje hasta París, donde conoce al fotógrafo David Seymour quien
le ayuda a conseguir trabajo como reportero gráfico con la revista
Regards, con el propósito de que cubriera las movilizaciones de las
tropas del Frente Popular.
Mientras intentaba escapar del nazismo entre 1932 y 1936, Endre Friedmann, radicado en Francia, conoce a la fotógrafa alemana Gerda Taro,
quien terminaría siendo su compañera. Como sus trabajos fotográficos
no eran bien cotizados, la pareja inventa el nombre de un reportero
norteamericano, Robert Capa, que usaban los dos
indistintamente, lo que a la larga generó la polémica de quien de los
dos es el autor de un sin número de fotografías muy sobresalientes.
Al estallar la Guerra Civil Española
en julio de 1936, se va a España a cubrir los principales
acontecimientos en los principales frentes de batalla, y allí tiene su
primera foto exitosa de guerra, Muerte de un Miliciano, que captó en
Cerro Muriano, Córdoba, el 5 de septiembre de 1936 y se hizo mundialmente famosa. Cuando ya se
retiraba el ejército republicano en la batalla de Brunete en julio de
1937, Gerda muere cuando cae del estribo del coche en el que
viajaba y es atropellada por un tanque.
Acabada la contienda española, Capa se dedicó a cubrir varios de los incidentes anteriores al estallido final de la Segunda Guerra Mundial,
como fue la invasión japonesa a la China. Luego, y una vez ya en plena
guerra mundial, recorre los principales escenarios bélicos de toda
Europa, viajando de 1941 a 1945 a Italia, Londres y el norte de África.
Una buena parte de las fotografías que tomó en Normandía del famoso Día
D del desembarco de las tropas aliadas, ya más que famosas, son
clásicas, al lado de los soldados que arribaban a la playa. Luego plasmó brillantemente en innumerables fotografías la liberación de París. Con motivo de su trabajo durante este conflicto, fue galardonado por el general Eisenhower con la Medalla de la Libertad.
Reunido con otros fotógrafos, Henri Cartier-Bresson, George Rodger, Bill Vandiver y David Seymour en
1947 abren la agencia Magnum Photos, con la cual Capa sobresalió no
sólo con trabajos fotográficos de conflictos bélicos, sino también con el retrato de
artistas como Pablo Picasso, Ernest Hemingway y John Steinbeck de quienes era muy amigo.
Fue
el primer corresponsal gráfico del bando norteamericano que murió en la Guerra de
Indochina y de quien siempre se recordará su célebre frase: Si tus fotos no son lo suficientemente buenas es que no te has acercado lo suficiente.
Robert Capa |
Muerte de un miliciano, Cerro Muriano, Córdoba, 5 septiembre 1936 |
Su amante, la tambíen fotógrafo Gerda Taro, Guerra Civil Española, 1937 |
Niños soldados en China, 1938 |
Ernest Hemingway, Sun Valley, Idaho, USA, octubre 1941 |
Campesino siciliano le cuenta a un soldado americano hacia dónde han ido los alemanes, julio 1943 |
Día D: Desembarco aliado en Normandía, playa de Omaha, 6 junio 1944 |
Liberación de París, agosto 1944 |
Campos Elíseos tras la liberación, París, agosto 1944 |
Pablo Picasso, su mujer Françoise Gillot y su sobrino Javier Vilato, Golfe-Juan, Francia, agosto 1948 |
Campo de refugiados, Israel, 1950 |
Su última foto: Siguiendo a soldados franceses camino de Namdih a Thaibinh en la Guerra de Indochina, Robert Capa encontró la muerte al pisar una mina antipersona, 24 mayo 1954 |
Estupenda semblanza!! Todo un trabajo artístico para ilustrarnos sobre Capa. Brillantemente documentado!
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