DE NIÑA PRODIGIO A ESTRELLA JUVENIL
Aniversario natal hoy de la actriz estadounidense Natalie Wood, tres veces candidata al Oscar antes de cumplir los veinticinco años, ganadora de un Globo de Oro a la mejor actriz por la serie televisiva "De aquí a la eternidad" (1979) y prematuramente desaparecida en un aun hoy misterioso accidente náutico.
Perfil biográfico tomado (y retocado) de la página El Criticón:
De nombre real Natasha Nikolaevna Zakharenko nació el 20 de julio de
1938 en la ciudad californiana de San Francisco. Era
hija de inmigrantes rusos que adoptaron el apellido Gurdin cuando se
asentaron en tierra americana. Con este apellido Natasha comenzó su
pronta carrera artística, estudiando ballet poco después de aprender a
caminar. Debutó en el cine a los cuatro años al aparecer sin acreditar en la
película Happy land (1943), un título dirigido por Irving Pichel. Durante la segunda mitad de la década de los años 40, la rebautizada
Natalie Wood (apellido que tomó del director Sam Wood), intervino en
films como Mañana es vivir (1946), película dirigida por Pichel que
contaba con Orson Welles y Claudette Colbert como principales protagonistas, o El fantasma y la señora Muir (1947), maravilloso film romántico-fantástico que rodó Joseph L. Mankiewicz con el protagonismo de Gene Tierney, Rex Harrison y George Sanders. La pequeña Natalie saltó al estrellato con De ilusión también se vive
(1947), clásico navideño dirigido por George Seaton en el que interpretó
a la hija de Maureen O'Hara.
La transición de actriz infantil a adolescente, proceso que en
ocasiones suele resultar problemático, fue superada por Natalie de forma
espléndida, convirtiéndose en los años 50 en una de las actrices
jóvenes más destacadas del panorama de Hollywood. No estoy sola (1951) de Curtis Bernhardt, Sólo para tí (1952) de
Elliott Nugent, La estrella (1952) de Stuart Heisler con la
gran Bette Davis, El cáliz de plata (1954) de Victor Saville, cinta histórica que supuso el debut en el cine de Paul Newman y, sobre todo, Rebelde sin causa (1955), película dirigida por
Nicholas Ray y protagonizada por James Dean,
fueron sus títulos más importantes, especialmente este último, por el que fue nominada al Oscar como mejor intérprete femenina secundaria, además de Centauros del desierto (1956), western de John Ford en el que
aparecía su hermana Lana Wood interpretando el personaje de Natalie de
pequeña, el thriller Un grito en la noche (1956) de Frank Tuttle, el western Colinas ardientes (1956) de Stuart Heisler junto a Tab Hunter, o el film bélico Cenizas bajo el sol (1958) de Delmer Daves, con Frank Sinatra y Tony Curtis.
En 1957 Natalie se casó con el actor Robert Wagner, con quien
co-protagonizó la película Los jóvenes caníbales (1960). En el año
1963 se divorciaron para contraer matrimonio de nuevo en 1972. En el
período intermedio la actriz se casó con Richard Gregson, productor y
guionista con el que estuvo conviviendo desde 1969 hasta 1971 y con quien tuvo a su primera hija, Natasha (1970). Del segundo matrimonio con Wagner nació Courtney (1974).
La década de los 60 comenzó muy bien para la carrera cinematográfica de
Natalie, ya que fue protagonista de éxitos como Esplendor en la hierba
(1961), drama de Elia Kazan
en el que contaba como partenaire romántico con un joven Warren Beatty,
o West Side Story (1961), musical dirigido por Robert Wise y Jerome
Robbins en el que Natalie actuaba y bailaba, pero no cantaba, ya que la
voz que suena en el film es la de Marni Nixon. Natalie fue nominada al Oscar como mejor actriz principal por Esplendor en la hierba pero tampoco consiguió el galardón. Tras protagonizar La reina del vaudeville (1962) musical de Mervyn LeRoy con Rosalind Russell en el papel de su madre, la intérprete de California volvió a optar a la
dorada estatuilla sin suerte por la película Amores con un extraño (1963) de Robert Mulligan con Steve McQueen como acompañante masculino. Otros títulos importantes de Natalie Wood en los años 60 fueron la comedia La pícara soltera (1964) de Richard Quine, La carrera del siglo (1965) de Blake Edwards, La rebelde (1965) de Rober Mulligan, Propiedad condenada (1966) de Sydney Pollack, o Bob y Carol, Ted y Alice (1969), comedia marital dirigida por Paul Mazursky.
La producción cinematográfica de Natalie en los años 60 ya se había
reducido en comparación con el decenio anterior, pero fue a partir de
los años 70 cuando esta disminución se hizo más evidente.
Entre 1969 y la fecha de su muerte solamente rodó cinco películas para la gran pantalla, entre las que figuran El asunto (1973) de Gilbert Cates, Un detective curioso (1975) de Peter Hyams o Meteoro (1979) de Ronald Neame. El 29 de noviembre de 1981, mientras estaba rodando su última película, Proyecto Brainstorm (1983) de Douglas Trumbull, un accidente marítimo con su yate Splendor provocó
su muerte por ahogamiento. Tenía 43 años.
Bella y encantadora! La reseña, sin desperdicio, imprescindible!
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