'PIPPO'
Aniversario natal del legendario tenor italiano Giuseppe Di Stefano, conocido popularmente en su país como Pippo. Admirador de Beniamino Gigli, antes de dedicarse a la ópera se hacía llamar Nino Florio, curtiéndose con un repertorio de canzonette. Esgrimiendo una hermosa voz clara, cálida y aterciopelada, amén de sensibilidad interpretativa y gran presencia escénica, tras su debut operístico a los 25 años, su celebridad se hizo más acusada a partir de su primer encuentro con Maria Callas en una representación de La traviata de Verdi en Sao Paulo, a la que seguirían otros históricos emparejamientos en óperas como Lucia de Lammermoor de Donizetti o Tosca de Puccini (a la que se unió el barítono Tito Gobbi). En años de fama y fortuna amplió su repertorio más de lo aconsejable con roles de tenor dramático fuera de su registro -él era un tenor lírico spinto- a la postre perjudiciales para su voz, que fue perdiendo, además por su proceso asmático-alérgico y su afición a fumar habanos. Así, el que para muchos ha sido el mejor tenor lírico del siglo XX, lo fue sólo por unos años. No obstante, su reconocida influencia se dejó sentir en tenores como Luciano Pavarotti, Plácido Domingo o José Carreras y aún sigue inspirando a nuevas generaciones de cantantes. En sus memorias, Rudolf Bing, gerente del Met neoyorkino durante veintidós años, dijo que la voz de Giuseppe Di Stefano fue el más bello sonido que había escuchado jamás saliendo de una garganta humana.
Reseña biográfica entresacada del obituario de El Mundo:
Di Stefano se hizo conocido principalmente por sus frecuentes actuaciones junto a Maria Callas desde la década de los 40 a la de los 70. Por eso, entre sus fans era conocido como "el tenor de la Callas".
Hijo de un zapatero y una modista, nació el 24 de julio de 1921 en la localidad siciliana de Motta di Santa Anastasia, y creció en Milán. Asistió a un colegio de jesuitas para después dedicarse al estudio del canto.
Su debut se produjo en 1946 en Reggio Emilia en el rol de Des Grieux en Manon de Jules Massenet. Solamente un año después se presentaba en el mismo papel, pero en la Scala de Milán. Siguieron años en la Metropolitan Opera en Nueva York como el duque de Mantua en Rigoletto de Verdi y como Mario Cavaradossi en Tosca de Puccini en el Covent Garden de Londres.
En los años 50 y 60 fue probablemente el ídolo lírico mejor pagado del mundo, aunque Mario del Monaco, seis años mayor, a veces contaba con más preferencias por parte de la crítica y del público.
Los primeros problemas con su voz surgieron en 1963, durante la presentación de La bohème de Puccini en el Covent Garden. Di Stefano debió ser reemplazado al año siguiente por un colega más joven: era el inicio de la carrera del tenor estrella Luciano Pavarotti.
Los críticos acusaron a Stefano de haber forzado excesivamente su voz, lo que éste siempre desmintió en forma vehemente. Varios intentos por concretar su retorno artístico fracasaron, por lo que a finales de los 80 se despidió de los escenarios.
Sin embargo, se presentó todavía como 'regisseur'. En 1988 lo hizo en Taormina, con Cavalleria Rusticana, y en 1989 con el teatro de gira 'Stagione d'Opera Italiana' con La bohème de Puccini.
Di Stefano fue asaltado en 2004 en su vivienda en la costa keniana, al sur de Mombasa y quedó herido de gravedad. Por orden de su esposa, la cantante alemana Monica Curth, fue trasladado en un avión ambulancia a Italia y tratado en la clínica San Raffaele de Milán. "Desde entonces tuvo muchas enfermedades y ya practicamente no podía hacer nada solo", contó su mujer. Finalmente entró en coma el 23 de diciembre de 2007 hasta su muerte a los 86 años el 3 de marzo de 2008 en Milán.
Di Stefano puede ser escuchado en algunas de las grabaciones más famosas de Maria Callas, incluyendo versiones completas de las óperas Lucia de Lammermoor, I puritani, Il trovatore y La bohème.
La Ópera de Viena ha calificado de "uno de los más grandes tenores del Siglo XX" al italiano Giuseppe Di Stefano. Tras la noticia del fallecimiento, la ópera vienesa recordó en un comunicado que el cantante actuó 84 veces en este escenario en 13 papeles distintos, tras debutar con Des Grieux en Manon Lescaut el 16 de junio de 1957, cuando tenía 35 años. También cantó los papeles de Don José de Carmen, Cavaradossi de Tosca, Radamés de Aida, el duque de Mantua de Rigoletto, Gustavo III de Un ballo in maschera, Alfredo de La traviata y Alvaro de La forza del destino, entre otros.
Esta actuación en grabación efectuada en vivo en el Palacio de Bellas Artes de México en 1952, da fé de las cualidades para el bel canto del inolvidable Pippo.
Brillante!!! Tremenda publicación esta de Javi!!!
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