EL DURO DE LA WARNER
Aniversario natal del gran actor estadounidense James Cagney. Especializado en papeles de tipo duro, ganó, sin embargo, un Oscar (premio al que fue candidato en otras dos ocasiones) por su interpretación en una película musical, Yankee Doodle Dandy. Asímismo recibió el American Film Institute's Life Achievement Award en 1974 y la Medalla Presidencial de la Libertad en 1984. Orson Welles dijo de Cagney que era posiblemente el mejor actor aparecido en frente de una cámara.
Perfil biográfico tomado (con modificaciones) de la página El Criticón:
Uno de los grandes actores del cine clásico, James Francis Cagney Jr.
nació el 17 de julio de 1899 en la ciudad de Nueva York
en el seno de una humilde familia de inmigrantes irlandeses y noruegos,
siendo su madre Carolyn su principal sustento emocional. En 1918, cuando Cagney estaba estudiando Arte en la Universidad de
Columbia, su padre falleció, lo que le obligó, para ayudar
económicamente a su familia, a abandonar sus estudios y trabajar en
diversos oficios antes de iniciar su carrera como actor en el mundo del
vodevil, curiosamente interpretando un personaje femenino.
Tras debutar a mediados de los años 20 en Broadway, protagonizando
principalmente comedias musicales, James Cagney consiguió firmar un
contrato con la Warner Bros, estudio cinematográfico con el que se le
identificaría de por vida a partir de la década de los 30. Su primera incursión cinematográfica fue en la película Las vacaciones del pecador (1930), pero su primer papel significativo vendría con El enemigo público (1931), un film dirigido por William Wellman y
co-protagonizado por Jean Harlow en el que Cagney afianzaba su acerada imagen de gángster. Asímismo destacó poderosamente en Avidez de tragedia (1932) de Howard Hawks. Los registros interpretativos de este gran actor se expandían mucho más
allá del estereotipo de mafioso, protagonizando musicales como Desfile
de candilejas (1933) de Lloyd Bacon y Busby Berkeley, o divertidas
comedias como El guapo (1933) de Roy del Ruth. Con títulos como los citados, James Cagney se convirtió en una de las
máximas estrellas del cine de los años 30, decenio en el que trabajó a
destajo, muchas veces acompañado por su amigo Pat O'Brien, con quien coincidió en
películas como Aguilas heroicas (1935) de Howard Hawks o Angeles con caras sucias
(1938), film de Michael Curtiz en el que también aparecía Humphrey
Bogart y por la que obtuvo su primera nominación al Oscar. La década abundaría en magníficas películas como Contra el imperio del
crimen (1935) de William Keighley, El sueño de una noche de verano (1935) una curiosa adaptación de la
comedia de Shakespeare dirigida
por William Dieterle
y Max Reinhardt, The Oklahoma kid (1939), respetable western
realizado por Lloyd Bacon o la espléndida Los violentos años 20
(1939), film dirigido por Raoul Walsh.
Los años 40 comenzaron de forma inmejorable para Cagney protagonizando Ciudad de conquista (1940) un título de boxeo de Anatole Litvak, La pelirroja (1941) de Raoul Walsh o Capitanes de las nubes (1942) de Michael Curtiz. Más tarde encabezó el reparto
del estimable musical de Michael Curtiz Yanqui dandy (1942), película
por la que James Cagney consiguió el Oscar al mejor actor. Poco después de este éxito James Cagney abandonó la Warner al no llegar a
un acuerdo salarial y fundó una productora independiente llamada Cagney
Productions. Esta aventura terminó en fracaso, teniendo que regresar a
su antiguo estudio para protagonizar bajo las órdenes de Raoul Walsh y
el acompañamiento de Virginia Mayo
y Edmond O'Brien la obra maestra Al rojo vivo (1949), película de
gángsters en la que interpretó el personaje de Cody Garrett.
La década de los 50 contaría igualmente con buenos títulos como Un león
en las calles (1953) de Raoul Walsh, Busca tu refugio (1955) de Nicholas Ray, Amame o déjame (1955) de Charles
Vidor, por la que recibió su tercera candidatura al Oscar, Escala en Hawai (1955) de John Ford y Mervyn Leroy, La ley de la horca (1956) de Robert Wise, El hombre
de las mil caras (1957), biopic sobre el actor Lon Chaney
que dirigió Joseph Pevney y Luces de rebeldía (1959), un título de
Michael Anderson. Después de protagonizar la gran comedia de Billy Wilder, Uno, dos, tres (1961), James Cagney tomó la decisión de retirarse del
cine, regresando de manera sorprendente en los años 80 con Ragtime
(1981), una película dirigida por Milos Forman, en la que también
aparecía Pat O'Brien, su compañero en películas de los
años 30.
James Cagney falleció el 30 de marzo de 1986 en Nueva York dejando viuda
a su única esposa, Frances Vernon, con la que se había casado en 1922 y con quien tuvo dos hijos. Contaba 86 años.
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