SECUNDARIA DE LUJO
Hoy es aniversario natal de la actriz estadounidense Thelma Ritter, intérprete de gran personalidad y una de las más competentes y destacadas secundarias que ha dado el cine de Hollywood. Especializada en comedias, ofreció toda una galería de maduras matronas, generalmente de clase obrera, entre pintorescas y gruñonas, de las que no se muerden la lengua. Si bien, por lo común, no salió de ese estereotipo, a base de talento consiguió pulirlo hasta la perfección. Aunque nunca lo ganó, fue candidata seis veces al Oscar como mejor actriz secundaria y premiada con un Tony teatral como mejor actriz principal en un musical.
Tras aparecer en funciones escolares y formar parte de compañías de repertorio, Thelma estudió en la American Academy of Dramatic Arts y trabajó profesionalmente en el teatro y la radio. En 1927 se casó con Joseph Moran, un actor que pasó a trabajar en el mundo de la publicidad y con quien tuvo
dos hijos, lo que la apartó temporalmente del ambiente artístico. Más tarde, volvió al mundo de la interpretación en la década
de los 40. Su debut en el cine se produjo con De ilusión también se vive (1947) de George Seaton, a la que siguieron Yo creo en tí (1948) de Henry Hathaway y Carta a tres esposas (1949) de Joseph L. Mankiewicz, aunque en esas tres películas sus papeles fueron de extra y sin acreditar.
Ya con su nombre en los créditos apareció en City across the river (1949) de Maxwell Shane. En Eva al desnudo (1950) de Joseph L. Mankiewicz, donde era Birdie, la asistente de Bette Davis, logró llamar poderosamente la atención y por ese papel recibió su primera nominación al Oscar. La segunda la obtuvo al año siguiente por Casado y con dos suegras (1951) de Mitchell Leisen, divertidísima comedia con Gene Tierney, John Lund y Miriam Hopkins. Después de que George Cukor la dirigiese en La modelo y la casamentera (1951) junto a Jeanne Crain y Scott Brady, intervino en la película que le proporcionó su tercera opción al premio de la Academia, Con una canción en mi corazón (1952) de Walter Lang, biopic sobre la cantante Jane Froman encarnada por Susan Hayward. También fue una de las pasajeras (y superviviente) de El hundimiento del Titanic (1953) de Jean Negulesco, y por el interesante noir Manos peligrosas (1953) de Samuel Fuller, con Richard Widmark y Jean Peters, donde era una confidente obsesionada por su entierro, fue nominada al Oscar por cuarto año consecutivo. Asímismo formó parte del reparto en la comedia The farmer takes a wife (1953) de Henry Levin, protagonizada por Betty Grable, y fue la enfermera a domicilio de James Stewart en La ventana indiscreta (1954) de Alfred Hitchcock.
Ya imprescindible en toda clase de producciones, se lució en el musical Papá piernas largas (1955) de Jean Negulesco, junto a Fred Astaire y Leslie Caron, el drama bélico Los héroes también lloran (1956) de George Seaton, con William Holden y Deborah Kerr, la comedia Millonario de ilusiones (1959) de Frank Capra, protagonizada por Frank Sinatra, donde ella era la esposa de Edward G. Robinson, Confidencias a medianoche (1959) de Michael Gordon, una muy taquillera comedia con Rock Hudson y Doris Day, que le reportó su quinta nominación al Oscar, Vidas rebeldes (1961) de John Huston, drama con Clark Gable, Marilyn Monroe y Montgomery Clift, Sola ante el peligro (1961) de Vincent Sherman, western humorístico protagonizado por Debbie Reynolds y siendo candidata al Oscar por sexta vez interpretando a la manipuladora madre de Burt Lancaster en El hombre de Alcatraz (1962) de John Frankenheimer, uno de sus más destacados trabajos dramáticos.
Aún se la vería en La conquista del Oeste (1962), en el episodio dirigido por Henry Hathaway, la comedia Tres herederas (1963) de Michael Gordon, con reparto encabezado por Kirk Douglas, Samantha (1963) de Melville Shavelson, comedia romántica con Paul Newman y Joanne Woodward, Apártate, cariño (1963), otra comedia de Michael Gordon, con Doris Day, James Garner y Polly Bergen, Boeing boeing (1965) de John Rich, comedia con Tony Curtis y Jerry Lewis, el thriller El incidente (1967) de Larry Peerce y Qué hermosa es la vida (1968) de George Seaton, comedia con George Peppard y Mary Tyler Moore.
Poco después de una actuación televisiva en el show de Jerry Lewis a comienzos de 1969, falleció de un ataque al corazón a los 66 años. La sobrevivieron su marido y sus hijos.
Papíto Piernas Largas! Sí, la recuerdo muy bien!
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