ACTOR COMPROMETIDO
El actor francés Jean-Louis Trintignant cumple hoy 85 años. Uno de los intépretes más destacados del cine europeo en la segunda mitad del siglo XX, en su abundante filmografía (que incluye títulos políticamente comprometidos) ha trabajado con bastantes de los más importantes directores de su tiempo. Ha sido distinguido como mejor actor en los festivales de Berlín y Cannes, un David di Donatello especial, el Premio del Cine Europeo y el César (de entre cinco nominaciones).
Hijo de un industrial de clase alta, Jean-Louis Xavier Trintignant se trasladó a París a los veinte años para estudiar interpretación. Hizo sus primeros
papeles en el teatro a principios de los 50 en diversos montajes. Debutó en el cine con T.K.X. no contesta (1956) de Christian-Jaque y se hizo notar en Y Dios creó a la mujer (1956) de Roger Vadim, película de éxito descomunal que convirtió en mito erótico a Brigitte Bardot. Un idilio con la nueva estrella aireado por la prensa le señala prematuramente como foco de atención, pero un largo servicio militar en Argelia hace que tres años después tenga que empezar de nuevo. En 1959 se rehace, primero en el teatro con un "Hamlet" extraordinario y después en la pantalla, primero en Francia, en Relaciones peligrosas de Roger Vadim, adaptación de una novela de Choderlos de Laclos a tiempos contemporáneos, con Jeanne Moreau y Gérard Philipe, y luego en Italia, con Verano violento (1959) de Valerio Zurlini, drama durante la caída de Mussolini, con Eleonora Rossi Drago. A partir de entonces alterna los rodajes a ambos lados de los Alpes.
El Trintignant de comienzos de los 60 actúa jugando con la fragilidad, con una gentileza tierna y una sonrisa desconcertante y, a veces, con una dureza cortante. Entre las películas que rodó en esta época figuran Austerlitz (1960) de Abel Gance, film histórico con reparto multiestelar, Cita de sangre (1962) de André Versini, drama criminal con Charles Aznavour, Raymond Pellegrin y Giovanna Ralli, Combate en la isla (1962) de Alain Cavalier, thriller con Romy Schneider, o La escapada (1962) de Dino Risi, sátira tragicómica acerca de la realidad del 'boom' económico italiano de los años 60, con Vittorio Gassman y Catherine Spaak. En esta película de enorme repercusión Trintignant era un estudiante de Derecho, extremadamente tímido, que se deja embaucar por un vividor para iniciar un alocado viaje en un descapotable. Después intervino en El éxito (1963) de Dino Risi, comedia dramática con Vittorio Gassman y Anouk Aimée, Mata-Hari, agente H-21 (1964) de Jean-Louis Richard, drama bélico de espionaje con Jeanne Moreau, Los raíles del crimen (1965) de Costa-Gavras, noir con Catherine Allégret, Jacques Perrin, Simone Signoret, Michel Piccoli e Yves Montand, Un hombre y una mujer (1966) de Claude Lelouch, drama romántico con Anouk Aimée que ganó la Palma de Oro en Cannes, el Globo de Oro y el Oscar a la mejor película de lengua no inglesa, Ha desaparecido un hombre (1966) de Michel Drach, drama criminal con Marie-José Nat, El acecho (1967) de Philippe Condroyer, thriller con Valérie Lagrange, Las ciervas (1968) de Claude Chabrol, drama psicológico con Jacqueline Sassard y Stéphane Audran, El hombre que miente (1968) de Alain Robbe-Grillet, drama bélico por el que Trintignant logró el Oso de Plata al mejor actor en el Festival de Berlín, El gran silencio (1968) de Sergio Corbucci, spaghetti-western con Klaus Kinski, Una viuda desenfrenada (1968) de Pasquale Festa Campanile, comedia dramática con Catherine Spaak, Z (1969) de Costa-Gavras, drama político con Yves Montand e Irene Papas, premio al mejor actor en Cannes, Globo de Oro y Oscar a la mejor película de lengua no inglesa, Supongamos que una noche, cenando... (1969) de Giuseppe Patroni Griffi, con Lino Capolicchio, Tony Musante y Florinda Bolkan, Mi noche con Maud (1969) obra maestra de Eric Rohmer y tercero de sus cuentos morales, con Françoise Fabian.
En los años 70 y 80 mantuvo su estatus estelar con títulos como El conformista (1970) de Bernardo Bertolucci, adaptación de una novela de Alberto Moravia, con Stefania Sandrelli y Dominique Sanda que alcanzó gran reputación crítica, El canalla (1970) de Claude Lelouch, policiaco con Danièle Delorme, Sin móvil aparente (1971) de Philippe Labro, thriller de intriga con Dominique Sanda y Sacha Distel, Como liebre acosada (1972) de René Clément, thriller con Robert Ryan, Lea Massari y Aldo Ray, El atentado (1972) de Yves Boisset, thriller político con Michel Piccoli, Jean Seberg y Gian Maria Volonté, Funeral en Los Ángeles (1972) de Jacques Deray, thriller con Ann-Margret, Roy Scheider y Angie Dickinson, Anna Kauffman (1973) de Pierre Granier-Deferre, adaptación de una novela de Georges Simenon, con Romy Schneider, Los violines del baile (1974) de Michel Drach, drama biográfico con Marie-José Nat, El trepa (1974) de Michel Deville, comedia dramática con Jean-Pierre Cassel y Romy Schneider, El secreto (1974) de Robert Enrico, thriller con Marlène Jobert y Philippe Noiret, La agresión (1975) de Gérard Pirès, drama criminal con Catherine Deneuve y Claude Brasseur, Historia de un policía (1975) de Jacques Deray, thriller criminal con Alain Delon, Llueve sobre Santiago (1976) de Helvio Soto, drama sobre el golpe de estado militar acaecido en Chile en 1973, La mujer del domingo (1975) de Luigi Comencini, thriller con Marcello Mastroianni y Jacqueline Bisset, El desierto de los tártaros (1976) de Valerio Zurlini, drama militar de época con Vittorio Gassman, Giuliano Gemma, Helmut Griem, Philippe Noiret, Jacques Perrin, Francisco Rabal, Fernando Rey, Laurent Terzieff, y Max von Sydow, El hombre que nos persigue (1977) de Serge Leroy, drama de intriga con Mireille Darc y Bernard Fresson, El dinero de los demás (1978) de Christian de Chalonge, drama con Claude Brasseur, Michel Serrault y Catherine Deneuve, La banquera (1980) de Francis Girod, drama con Romy Schneider, La terraza (1980) de Ettore Scola, drama con Ugo Tognazzi, Vittorio Gassman y Marcello Mastroianni, Os quiero (1980) de Claude Berri, comedia dramática con Catherine Deneuve, Gérard Depardieu, Serge Gainsbourg y Alain Souchon, Ha pasado un asesino (1981) de Michel Vianey, thriller con Carole Laure y Richard Berry, Entre el amor y la muerte (1981) de Ettore Scola, con Valeria D'Obici, Bernard Giraudeau y Laura Antonelli, Golpear al corazón (1982) de Gianni Amelio, drama con Laura Morante, Vivamente el domingo (1983) de François Truffaut, thriller con Fanny Ardant, Bajo el fuego (1983) de Roger Spottiswoode, drama sobre la revolución sandinista en Nicaragua, con Nick Nolte, Gene Hackman y Joanna Cassidy, Mi amante prohibido (1984) de Francis Girod, drama con Catherine Deneuve y Michel Serrault, El próximo verano (1985) de Nadine Trintignant, drama familiar con Philippe Noiret, Claudia Cardinale y Fanny Ardant, La cita (1985) de André Téchiné, drama con Lambert Wilson y Juliette Binoche, Un hombre y una mujer: 20 años después (1986) de Claude Lelouch, drama romántico secuela del éxito de dos décadas atrás con Anouk Aimée, La mujer de mi vida (1986) de Régis Wargnier, con Jane Birkin y Christophe Malavoy, El valle fantasma (1987) de Alain Tanner, drama con Laura Morante y Jacob Berger, o Bunker Palace Hôtel (1989) de Enki Bilal, film de ciencia-ficción con Carole Bouquet y Maria Schneider.
En adelante se fue alejando poco a poco de la pantalla, interviniendo aún en títulos como Mira a los hombres caer (1994) de Jacques Audiard, drama criminal con Jean Yanne y Mathieu Kassovitz, Tres colores: Rojo (1994) de Krzysztof Kieslowski, drama con Irène Jacob, Fiesta (1995) de Pierre Boutron, drama con Gregoire Colin, Un héroe muy discreto (1996) de Jacques Audiard, con Mathieu Kassovitz, o Los que me quieren cogerán el tren (1998) de Patrice Chéreau, drama con Valeria Bruni Tedeschi, Charles Berling y Pascal Greggory. Cuando ya se había retirado del cine y dedicado a la producción de vino, el director Michael Haneke le convenció para que aceptase un papel protagonista junto a Emmanuelle Riva e Isabelle Huppert en Amor (2012), estremecedor drama sobre la enfermedad, la vejez, la discapacidad y la muerte (galardonado con la Palma de Oro en el Festival de Cannes), donde Trintignant ofreció la interpretación más conmovedora de su carrera, premiada con el César al mejor actor.
Jean-Louis Trintignant se casó en 1954 con la actriz Stéphane Audran, de la qe se divorció en 1956. Su segunda esposa, a partir de 1961, fue la actriz y directora Nadine Marquand, que cambió su nombre a Nadine Trintignant. Del matrimonio nacieron Marie Trintignant (1962-2003), Pauline (1969-1970) y Vincent Trintignant (1973). La repentina muerte de Pauline a la edad de 9 meses sumergió a
la pareja en el dolor. Ambos acabaron divorciándose. Con la llegada del siglo XXI, la salud del actor ha ido empeorando como
consecuencia de un accidente automovilístico y el disgusto ocasionado
por la pérdida de su hija. La noche del 26 al 27 de julio
de 2003, la actriz Marie Trintignant, mientras se encontraba en Vilna (Lituania) por motivos profesionales, tuvo una disputa con
su novio, el cantante de rock Bertrand Cantat (con el que había tenido una relación de dieciocho meses).
Durante la pelea Cantat golpeó repetidamente a Marie (diecinueve
golpes, según la autopsia). El 29 de julio de 2003 fue operada
en un hospital de Vilna, y repatriada a Francia el 31 de julio en estado
de muerte cerebral a causa de un edema. Falleció al día
siguiente, 1 de agosto, en Neuilly-sur-Seine. A lo largo del juicio que lo condenó por homicidio involuntario, quedó demostrado que Cantat apaleaba a su amante con implacable regularidad, por las razones más diversas. Para desolación de los padres de Marie, fue puesto en libertad a los tres años.
POSDATA
Jean-Louis Trintignant falleció en Uzès, una pequeña población al sur de Francia, el 17 de junio de 2022. Contaba 91 años de edad.
Muy completa, amena y bien documentada síntesis.
ResponderEliminarGran actor entre los mejores del cine europeo y mundial
ResponderEliminar