Maximilian Schell (Viena, Austria, 8-12-1930 / Innsbruck, Austria, 1-2-2014): In memoriam

POLIFACÉTICO TALENTO BILINGÜE

Hoy se cumple el 85 aniversario natal del polifacético actor austro-suizo Maximilian Schell, que también escribió, dirigió y produjo algunas películas propias. Ganó el Oscar al mejor actor por su segunda película en Hollywood y fue nominado al mismo premio otras dos veces. También recibió dos Globos de Oro entre otros muchos reconocimientos. Sólido y prestigioso intérprete tanto en alemán como en inglés, se le considera uno de los mejores actores de lengua extranjera que ha trabajado en Hollywood.

Maximilian Schell fue el tercero de los cuatro hijos de un escritor y farmacéutico y de una actriz. Cuando en 1938 los nazis se anexionaron Austria, su familia se trasladó a Suiza, estableciéndose en Zurich. Maximilian creció leyendo a los clásicos y estudió en la Universidad de esa ciudad por un año. Al finalizar la guerra se desplazó a Alemania para continuar estudiando filosofía e historia del arte en la Universidad de Munich. Aunque en principio quería ser pintor, músico o dramaturgo, su participación en funciones universitarias le decidió a ser actor.

Su debut en el teatro se produjo en 1952 y en el cine en 1955. Después de intervenir en diversos rodajes en Alemania, fue contratado para su primer film americano, El baile de los malditos (1958) de Edward Dmytryk, con Marlon Brando, Montgomery Clift y Dean Martin, aclamada película bélica sobre el destino de dos oficiales de distinto bando -un americano y un alemán- durante la Segunda Guerra Mundial.

Por su papel de abogado defensor en ¿Vencedores o vencidos? (1961) de Stanley Kramer, drama sobre el jucio de Nuremberg contra los crímenes de guerra nazis, donde le acompañaron en el reparto Spencer Tracy, Burt Lancaster, Richard Widmark, Marlene Dietrich, Judy Garland y Montgomery Clift, ganó el Globo de Oro y el Oscar al mejor actor. El del abogado Hans Rolfe era un rol que ya había desempeñado en 1959 en la televisión alemana, al igual que un "Hamlet" representado en la pequeña pantalla en 1960 y en diversas producciones posteriores que le dieron la reputación de ser considerado, junto con Laurence Olivier, uno de los mejores Hamlet de todos los tiempos.

Ya convertido en estrella internacional actuó en Ejercicio para cinco dedos (1962) de Daniel Mann, adaptación de un drama de Peter Shaffer, con Rosalind Russell, Jack Hawkins y Richard Beymer, El hombre que no quería ser santo (1962) de Edward Dmytryk, drama religioso con Ricardo Montalban y Lea Padovani, Los condenados de Altona (1962) de Vittorio De Sica, traslación a la pantalla de una obra de Jean-Paul Sartre, con Sophia Loren, Fredric March y Robert Wagner, Topkapi (1964) de Jules Dassin, comedia de aventuras con Melina Mercouri y Peter Ustinov, Una llamada a las doce (1965) de J. Lee Thompson, thriller con Samantha Eggar, Ingrid Thulin y Herbert Lom, Llamada para un muerto (1966) de Sidney Lumet, thriller de espionaje con James Mason, Harriet Andersson, Harry Andrews y Simone Signoret, El castillo (1968) de Rudolf Noelte, adaptación de la novela de Kafka donde interpretó a K, Una tumba al amanecer (1968) de Ralph Nelson, film bélico con Charlton Heston, Más allá de las montañas (1968) de Alexander Ramati, drama aventurero con Raf Vallone e Irene Papas, Simón Bolívar (1969) de Alessandro Blasetti, drama histórico con Rosanna Schiaffino y Francisco Rabal, Krakatoa, al este de Java (1969) de Bernard L. Kowalski, aventuras en el siglo XIX con Diane Baker y Brian Keith, Primer amor (1970), adaptación de una novela de Ivan Turgeniev que Schell dirigió y protagonizó junto a John Moulder-Brown y Dominique Sanda, obteniendo una nominación al Oscar a la mejor película en lengua extranjera, o La papisa Juana (1972) de Michael Anderson, drama histórico medieval con Franco Nero y Liv Ullmann. El peatón (1973), su siguiente pelicula como director, volvió a ser candidata al Oscar y ganó el Globo de Oro a la mejor película extranjera.

Como actor siguió apareciendo en títulos como Odessa (1974) de Ronald Neame, thriller de espionaje con Jon Voight, El hombre de la cabina de cristal (1975) de Arthur Hiller, drama sobre el nazismo por el que fue candidato al Oscar al mejor actor por segunda vez, El temerario Ives (1976) de J. Lee Thompson, thriller de acción con Charles Bronson, John Houseman y Jacqueline Bisset, La cruz de hierro (1977) de Sam Peckinpah, film bélico con James Coburn y James Mason, Julia (1977) de Fred Zinnemann, adaptación de un episodio de la autobiografía de Lillian Hellman, con Jane Fonda y Vanessa Redgrave, por la que fue nominado al Oscar por tercera vez, en este caso, como actor secundario, Un puente lejano (1977) de Richard Attenborough, superproducción bélica con reparto multiestelar, El tren de los espías (1979) de Mark Robson, thriller con Lee Marvin, Robert Shaw y Linda Evans, El abismo negro (1979) de Gary Nelson, aventura espacial con Anthony Perkins, Robert Forster, Joseph Bottoms, Yvette Mimieux y Ernest Borgnine, Elegidos del ghetto (1981) de Jeremy Kagan, drama con Rod Steiger y Robby Benson, Los clandestinos de Asís (1985) de Alexander Ramati, drama con Ben Cross, James Mason e Irene Papas, Juicio a un desconocido (1989) de Fons Rademakers, drama sobre el holocausto con Liv Ullmann y Peter Fonda, El novato (1990) de Andrew Bergman, comedia criminal con Marlon Brando y Matthew Broderick, Un lugar muy lejano (1993) de Mikael Salomon, drama aventurero en Africa con Reese Witherspoon, Cuestión de sangre (1994) de James Gray, thriller con Tim Roth, Edward Furlong, Moira Kelly y Vanessa Redgrave, Idolos, mentiras y rock and roll (1997) de Guy Ferland, drama con Kevin Bacon y Brad Renfro, Corazones enfrentados (1998) de Jeroen Krabbé, drama con Isabella Rossellini, Vampiros (1998) de John Carpenter, western gótico y bizarro con James Woods, Deep impact (1998) de Mimi Leder, drama catastrofista de ciencia-ficción con Robert Duvall, Téa Leoni, Elijah Wood, Vanessa Redgrave y Morgan Freeman, etc. Schell intervino también en buen número de producciones televisivas, llegando a ganar un Globo de Oro al mejor actor secudario interpretando a Lenin en el telefilm "Stalin".

Otros de sus trabajos como director incluyen El puente sobre Estambul (1975), thriller con Jon Voight y Jacqueline Bissett, y  los documentales Marlene (1984), sobre Marlene Dietrich, nominado al Oscar, y Mi hermana María (2002), sobre su hermana mayor, la actriz Maria Schell.

En los años 60 mantuvo un romance de tres años con la princesa Soraya, ex-esposa del Shah de Iran. En 1986 se casó con la actriz rusa Natalya Andrejchenko, con quien tuvo una hija en 1989. Separado el matrimonio en 2002, se divorciaron en 2005. En 2013 se casó con la cantante de ópera Iva Mihanovic, que sería su viuda pocos meses después. Maximilian Schell falleció de neumonía a los 83 años.