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miércoles, 24 de agosto de 2016

Beny Moré - Hoy como ayer

BENY MORÉ (Santa Isabel de las Lajas, Cuba, 24-8-1919 / La Habana, Cuba, 19-2-1963): IN MEMORIAM

Hoy es aniversario natal del cantante, compositor y director de orquesta cubano Beny Moré, conocido como 'El Bárbaro del Ritmo' o 'El Sonero Mayor de Cuba'. Sin lugar a dudas, uno de los más grandes artistas de la música popular de su país, se destacó en la interpretación de casi todos los géneros bailables cubanos, particularmente el bolero, el son y el mambo.
Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez nació en el barrio de Pueblo Nuevo del poblado de Santa Isabel de las Lajas, en la entonces provincia de Las Villas, perteneciente a la jurisdicción de Cienfuegos. Descenciente de esclavos, fue un hijo (no reconocido) de Virginia Moré y Silvestre Gutiérrez. Era el mayor de dieciocho hermanos de un hogar marcado por la raza y condición social, lo que equivalía a marginación y pobreza. Practicamente condenado a la mísera vida de cortador de caña de azúcar, decidió explotar la afición musical heredada de su madre y siendo adolescente se compró una guitarra.
Llega en 1940 a La Habana, donde la emisora CMQ comienza un programa titulado Corte Suprema del Arte, en el que concursa todo tipo de artistas. Los que triunfan son contratados por empresarios sin escrúpulos, que los explotan, otros corren peor suerte y su participación en el concurso es cortada de forma brusca y humillante por medio del toque de una campana. Bartolomé se presenta al concurso y nada más empezar a cantar le tocan la campana. Más adelante vuelve a participar en este programa y gana el primer premio. Así consigue su primer trabajo estable con el conjunto Cauto, que dirigía Mozo Borgellá. En la emisora CMZ canta con el sexteto Fígaro de Lázaro Cordero y en 1944 debuta en la emisora 1010, con un gran éxito, actuando con el septeto Cauto. Por entonces, Siro Rodríguez, del Trío Matamoros, lo escucha cantar en un bar y queda favorablemente impresionado. Algo después, el Trío Matamoros tiene que cantar en la emisora 1010 pero Miguel Matamoros está afónico y le pide a Borgellá que le preste a uno de sus cantantes. Borguellá envía a Bartolomé, que se quedó con Matamoros, grabando varios discos. Al entrar, Bartolomé pasa a ser la primera voz, sustituyendo en este cometido a Miguel Matamoros, que se dedica a dirigir el conjunto.
En 1945 Beny Moré fue por primera vez a México como cantante principal del Conjunto Matamoros para cantar en una serie de presentaciones en la emisora XEW y los centros nocturnos El Patio y Follies. Al concluir estos compromisos y marcharse Miguel Matamoros a España, Moré decidió quedarse. Allí adoptó su nombre artístico y emprendió carrera como solista. Asímismo destacó como compositor (ya a los 14 años había compuesto Desdichado), en canciones como Amor fugaz y Dolor y perdón, inspiradas por Margarita Bocanegra, enfermera mexicana con quien contrajo matrimonio el 25 de agosto de 1945. Muchas de sus composiciones le brotaban en los momentos y lugares más inesperados, mientras se bañaba o a la hora de comer. "Alcánzame un papel y un lápiz que se me acaba de ocurrir una melodía", le decía a Margarita, y así surgió Bonito y sabroso. Analfabeto musical, Benny era capaz de dictar a sus arreglistas lo que imaginaba, con fabuloso sentido de la armonía, los timbres y el ritmo. Y su voz de tenor, densa pero lírica, se mostraba alegre o melancólica, sensual o violenta. En su tierra natal había asimilado la música religiosa de los congos, la rumba negra y la trova tradicional. Era poco menos que imposible bailar con la música de Beny sin caer en la tentación de observar al mismo tiempo lo que hacía sobre el escenario. Y es que el factor escénico, tal como lo empleaba Moré, fue consustancial a su arte, aun cuando su singularidad de creador musical jamás dependió de extravagancias ni de elementos extramusicales para ponerse de realce.
En La Habana se hizo maestro del género dominante, el bolero. Durante su estancia en México quedó deslumbrado con las grandes orquestas, de ahí su interés por participar con las mejores. Grabó con la Orquesta de Ernesto Duarte inolvidables melodías: Cómo fue, Oh, vida, Fiebre de tí, Hoy como ayer, Te quedarás, Corazón rebelde, Que me hace daño y muchas otras; después con la suya propia, la Orquesta Gigante. En los años 50 hizo giras por muchos países de América Latina y asímismo viajó a Estados Unidos como cantante de la Orquesta de Luis Arcaraz, con la que actuó en la ceremonia de entrega de los Oscar.  Ganó montones de dinero, pero así mismo lo derrochó en francachelas de juego, licor y mujeres. Estos excesos de alcohol, tabaco y peripecias de alcoba sumados al trabajo y las noches sin dormir terminaron de minar su salud ya resentida por las privaciones de la pobreza que sufrió de niño y adolescente. Pasó los últimos años de su vida en permanente desencuentro entre su actividad artística y su precaria salud afectada seriamente por el alcohol. Su estancia en México durante alrededor de quince años, con sus obligadas visitas a Cuba, había sido placentera, pero la nostalgia por su isla y por su gente le decidieron a regresar en 1960 a La Habana, a poco del triunfo de la revolución castrista, permaneciendo allí hasta el día de su muerte por cirrosis hepática a los 43 años. Su arte dejó un vacío inmenso y difícil de llenar.

 


En el video se puede apreciar la labor de Beny Moré como vocalista y director de orquesta en el bolero Hoy como ayer del compositor habanero Pedro Vega.

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