EXTRA, STUNTMAN, ACTOR SECUNDARIO Y, FINALMENTE, PROTAGONISTA
Hoy es aniversario natal del actor estadounidense de cine y televisión Richard Farnsworth. La mayor parte de su carrera fue una de esas presencias que pasan desapercibidas en las películas. El celuloide lo registró fugazmente como extra por primera vez en 1937, participando después en ese cometido durante casi cuarenta años en buen número de títulos, generalmente cabalgando, y
doblando en ocasiones a estrellas como Roy Rogers, Gary Cooper, Henry
Fonda, Kirk Douglas, Montgomery Clift o Steve McQueen en escenas de riesgo. Pero Farnsworth tenía madera de actor y así lo fue demostrando cuando tuvo la oportunidad. Con Llega un jinete libre y salvaje (1978) obtuvo, como secundario, su primera nominación al Oscar. Respetado actor de carácter, llegó incluso a desempeñar algunos valorados papeles como protagonista, así El zorro gris (1982). Pero sin duda ofreció su más celebrada interpretación en su última película, Una historia verdadera (1999), la estremecedora odisea de un anciano para saldar cuentas con el pasado, por la que Farnsworth fue por segunda vez candidato al Oscar, en este caso como mejor actor protagonista (el más viejo aspirante en esa categoría en la historia de los premios de la Academia). Un año después se suicidó.
Hijo de un ingeniero y una ama de casa, Richard William Farnsworth creció con la Gran Depresión. A los siete años perdió a su padre, quedando él y sus dos hermanas al cuidado de su madre y una tía. Criado entre caballos, cuando tenía dieciséis estaba trabajando como mozo de establo en un campo de polo de Los Angeles. Fue entonces cuando le ofrecieron un empleo mejor pagado en las películas, primero como figurante y más adelante como especialista. Entre los títulos en que intervino como tal figuran Un día en las carreras (1937), Las aventuras de Marco Polo (1938), Gunga Din (1939), Lo que el viento se llevó (1939), Río Rojo (1948), El halcón y la flecha (1950), La ciudad sin ley (1955), Los Diez Mandamientos (1956), Cazador de forajidos (1957), Espartaco (1960), La noche de los gigantes (1968), Los indeseables (1972), Papillon (1973), Sillas de montar calientes (1974) o El fuera de la ley (1976). Aunque ocasionalmente le daban una o dos líneas de diálogo, durante casi treinta años su nombre no fue acreditado en las películas que requirieron su participación hasta Texas (1966) de Michael Gordon, western con
Dean Martin, Alain Delon, Joey Bishop y Rosemary Forsyth. Fue el comienzo de una carrera como actor de carácter, alternada todavía durante diez años más con trabajos como especialista.
Su filmografía acreditada se afianzó a partir de los años 70 con películas como Monte Walsh (1970) de William A. Fraker, western con
Lee Marvin,
Jeanne Moreau,
Jack Palance, Los cowboys (1972), western dirigido y protagonizado por John Wayne, La venganza de Ulzana (1972) de Robert Aldrich, western con Burt Lancaster, El juez de la horca (1972) de John Huston, western con Paul Newman, El alma de Nigger Charley (1973) de Larry G. Spangler, western con
Fred Williamson,
La duquesa y el truhán (1976) de Melvin Frank, western con Goldie Hawn y George Segal, y Otro hombre, otra mujer (1977) de Claude Lelouch, western con James Caan, Geneviève Bujold y Francis Huster. En todos estos westerns los papeles de Farnsworth fueron muy secundarios, por lo que su rostro no empezó a ser conocido en las salas de cine hasta que desempeñó un rol más relevante en Llega un jinete libre y salvaje (1978) de Alan J. Pakula, western con James Caan, Jane Fonda y
Jason Robards por el que Farnsworth fue candidato al Oscar al mejor actor de reparto. Después pudo ser visto en Tom Horn (1980) de William Wiard, western con Steve McQueen, Resurrección (1980) de Daniel Petrie, drama con Ellen Burstyn, La leyenda del Llanero Solitario (1981) de William A. Fraker, western con
Klinton Spilsbury,
Michael Horse,
Christopher Lloyd y Jason Robards, El zorro gris (1982) de Philip Borsos, western canadiense donde fue protagonista absoluto, Bailando a través de Texas (1982) de Ernest Day, drama con Anne Archer y Terry Jastrow, El día de la independencia (1983) de Robert Mandel, drama con Kathleen Quinlan,
David Keith,
Frances Sternhagen,
Cliff De Young y
Dianne Wiest, El mejor (1984) de Barry Levinson, drama deportivo con Robert Redford,
Robert Duvall,
Glenn Close y Kim Basinger, Rhinestone (1984) de Bob Clark, comedia con
Sylvester Stallone y
Dolly Parton, Cuando llega la noche (1985) de John Landis, comedia con
Jeff Goldblum y
Michelle Pfeiffer, Sylvester (1985) de Tim Hunter, drama familiar que protagonizó junto a Melissa Gilbert y Michael Schoeffling, Motín en el planeta prisión (1985) de Conrad E. Palmisano, western futurista con Michael Paré, El chico de Mississippi (1988) de Tom G. Robertson, film de aventuras donde fue protagonista, Los dos Jakes (1990), neo-noir dirigido y protagonizado por Jack Nicholson, Misery (1990) de Rob Reiner, drama de terror que adaptaba una novela de Stephen King, con James Caan, Kathy Bates, Frances Sternhagen y
Lauren Bacall, Habana (1990) de Sydney Pollack, drama con Robert Redford y
Lena Olin, Autopista al infierno (1991) de Ate de Jong, fantasía de aventuras con
Patrick Bergin,
Adam Storke,
Chad Lowe y
Kristy Swanson, La huida (1994) de Roger Donaldson, segunda adaptación a la pantalla de la novela homónima de Jim Thompson, con
Alec Baldwin y
Kim Basinger, o El regreso de Lassie (1994) de Daniel Petrie, film de aventuras con Thomas Guiry, Helen Slater, Jon Tenney y Frederic Forrest. Desde 1951 realizó también bastantes trabajos para la televisón.
Ya estaba semirretirado y muy enfermo cuando David Lynch le ofreció el papel protagónico en Una historia verdadera (1999), drama con
Sissy Spacek y
Harry Dean Stanton basado en hechos reales. En él interpretó a Alvin Straight, un anciano achacoso y pobre que recorre cientos de kilometros, desde Iowa a Wisconsin, en un viejo y minúsculo tractor cortacésped, trayecto que le lleva seis semanas. La finalidad de tan dificultoso desplazamiento es reconciliarse con su hermano, que ha sufrido un infarto y con el que no se habla desde diez años atrás. Con su última película, aclamada por la crítica, Farnsworth conmovió a espectadores de todo el mundo y obtuvo una nominación al Oscar al mejor actor protagonista.
Richard Farnsworth estuvo casado desde 1947 con Margaret Hill, con la que tuvo un hijo y una hija y de la que enviudó en 1985. Diagnosticado de cáncer terminal de próstata e incapaz de soportar el sufrimiento, se quitó la vida en su rancho de un disparo con su escopeta. Contaba 80 años de edad.
Qué dramático final! Lamentable, lo aprecié en varias de las películas que nos relata Javi.
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