EL MÁS RECONOCIDO CINEASTA CHINO
El director cinematográfico chino Zhang Yimou cumple hoy 66 años. Representante de la llamada 'quinta generación' de cineastas procedentes de la Academia de Pekín, ha llenado de esplendor y lirismo el género de espadas y caballeros y lo ha exportado a Occidente. Las películas que le hicieron famoso, por lo común de excepcional fotografía, emanan una detallada estética al servicio de una profunda historia que no deja indiferente al espectador. De los veinte films que ha dirigido, los diez primeros obtuvieron gran acogida crítica internacional y múltiples reconocimientos en varios festivales, y tres de ellos fueron candidatos al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa.
El director cinematográfico chino Zhang Yimou cumple hoy 66 años. Representante de la llamada 'quinta generación' de cineastas procedentes de la Academia de Pekín, ha llenado de esplendor y lirismo el género de espadas y caballeros y lo ha exportado a Occidente. Las películas que le hicieron famoso, por lo común de excepcional fotografía, emanan una detallada estética al servicio de una profunda historia que no deja indiferente al espectador. De los veinte films que ha dirigido, los diez primeros obtuvieron gran acogida crítica internacional y múltiples reconocimientos en varios festivales, y tres de ellos fueron candidatos al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa.
Hijo de un dermatólogo que fue militar del ejército de Chiang Kai-Shek durante la Guerra Civil China, Zhang pasó años difíciles bajo el represivo régimen comunista de Mao Tse Tung. Pronto abandonó sus estudios para trabajar en el campo y en una fábrica textil.
En su tiempo libre soñaba con convertirse alguna vez en director de
cine, pero la Escuela de Cine había sido cerrada por el gobierno. En 1976 murió Mao y se produjo una cierta apertura que permitió a Zhang
Yimou matricularse a comienzos de los años 80 en la Academia de Cine de
Pekín, en donde coincidió con otros miembros de la denominada 'quinta generación' de cineastas chinos, como Zhang Junzhao, Chen Kaige u otros, para quienes trabajó como director de fotografía.
Debutó como director con Sorgo rojo (1987), un drama rural premiado con el Oso de Oro en el Festival de Cine de Berlín en el que aparecía su actriz fetiche Gong Li, con la que Yimou dio inicio a una fructífera relación profesional además de convertirse en su pareja sentimental. Este vínculo acabó con su matrimonio con Xiao Hua (1978-1988). En Semilla de crisantemo (1990), otro drama rural, volvió a contar con Gong Li, incidiendo de nuevo en la mirada femenina, la evocación fotográfica, el espléndido empleo
del montaje, el minimalismo en los diálogos y la forma alegórica con afán
de crítica, lo que fue valorado por la Academia de Hollywood con una nominación al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa (la primera para una producción china). Las constantes previas también se aprecian en La linterna roja (1991), otro drama con Gong Li y una de sus
mejores películas, que, al igual que la anterior, fue censurada en su país
natal, lo que no impidió su candidatura al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa, en este caso representando a Hong Kong, además de, entre otros, los premios BAFTA (en la misma especialidad) y David di Donatello (al mejor film extranjero) y el León de Plata al mejor director en el Festival de Venecia para Yimou. Qiu Ju, una mujer china (1992), otro drama rural con intenciones satirícas, fue galardonado en Venecia con el León de Oro, al igual que au protagonista Gong Li, que ganó la Copa Volpi a la mejor actriz. ¡Vivir! (1994), enérgico drama sobre la revolución cultural china, nuevamente protagonizado por Gong Li, logró en Cannes el Gran Premio del Jurado y el de mejor actor para Ge You, y también el BAFTA a la mejor película en lengua no inglesa. Después del drama La joya de Shanghai (1995), Zhang Yimou y Gong Li rompieron relaciones profesionales y amorosas.
La comedia Mantén la calma (1997) fue su primer trabajo
sin Gong Li, en el que el propio Yimou apareció como actor. Fue un
trabajo menor dentro de su carrera, continuado por Ni uno menos (1999), un nuevo drama rural que ganó otra vez el León de Oro en el Festival de Venecia. El mismo año rodó El camino a casa (1999), drama romántico premiado
por la audiencia en Sundance y que en el Festival de Berlín recibió el
Gran Premio del Jurado. Este título contó con Zhang Ziyi como estrella femenina, protagonista de otras sucesivas películas de Yimou. Menos apreciada resultó la agridulce comedia sentimental Happy times (2000). Le siguieron Hero (2002), drama de artes marciales, la tercera producción de Yimou candidata al Oscar a la mejor película en lengua no inglesa, La casa de las dagas voladoras (2004), que combinaba episodios románticos con artes marciales, La búsqueda (2005), un drama protagonizado por el japonés Ken Takakura, La maldición de la flor dorada (2006), drama ambientado en el siglo X, con
Chow Yun-Fat y,
de nuevo, Gong Li.
En el año 2008 Yimou se encargó de la dirección de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Pekín. En Una mujer, una pistola y una tienda de fideos chinos (2009) realizó un remake de la película Sangre fácil (1984) de los hermanos Coen. Después estrenó Amor bajo el espino blanco (2011), drama sobre la revolución cultural china basado en hechos reales, Las flores de la guerra (2011), drama bélico con Christian Bale, la película más cara de la historia del cine chino, que le reformula como cineasta del régimen, Regreso a casa (2014), drama con Chen Daoming y Gong Li que se pretende metáfora de la memoria colectiva sobre la revolución cultural, y La gran muralla (2016), primer film de Yimou rodado en inglés, con protagonismo de Matt Damon, una fantasía épica de aventuras que tuvo éxito de taquilla pero malas críticas.
Fantástica la reseña de un director del que poco o nada sabía! Algunos de sus filmes son muy apreciables, incluyendo el último.
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