BELLEZA, ELEGANCIA Y TALENTO DE SUECIA
La actriz sueca Bibi Andersson cumple hoy 82 años. Belleza rubia de delicadeza ingenua, fue descubierta por Ingmar Bergman cuando era una adolescente y, durante casi dos décadas, se convirtió en una de las actrices más habituales en la películas del célebre cineasta, que en once ocasiones la dirigió en la gran pantalla (también lo hizo en el teatro y la televisión). Aparecer en varias de las obras maestras del célebre director sueco hizo que su rostro y su trabajo fuese conocido y reconocido fuera de su país y propició el despegue de una prolongada carrera internacional.
La actriz sueca Bibi Andersson cumple hoy 82 años. Belleza rubia de delicadeza ingenua, fue descubierta por Ingmar Bergman cuando era una adolescente y, durante casi dos décadas, se convirtió en una de las actrices más habituales en la películas del célebre cineasta, que en once ocasiones la dirigió en la gran pantalla (también lo hizo en el teatro y la televisión). Aparecer en varias de las obras maestras del célebre director sueco hizo que su rostro y su trabajo fuese conocido y reconocido fuera de su país y propició el despegue de una prolongada carrera internacional.
Segunda hija de un empresario y una trabajadora social, Berit Elisabeth Andersson estudió en el Kungliga Dramatiska Teatern y en el Royal Dramatic Teather de Estocolmo, institución a la que permanecería ligada durante treinta años. Siendo adolescente, en 1951 fue descubierta en el teatro por Ingmar Bergman, con quien rodó publicidad, y en 1953 debutó en el cine.
Después de aparecer en películas como El tesoro de Arne (1954) de Gustaf Molander, drama con Ulla Jacobsson y Ulf Palme, fue incluída en el reparto de Sonrisas de una noche de verano (1955) de Ingmar Bergman, magistral comedia de época con
Eva Dahlbeck,
Gunnar Björnstrand, Ulla Jacobsson,
Jarl Kulle, Harriet Andersson y Margit Carlqvist, donde actuó en un pequeño papel. Luego participó, interpretando papeles de creciente importancia en Entrada privada (1956) de Hasse Ekman, drama con
Maj-Britt Nilsson y
Alf Kjellin, La última pareja que corre (1956) de
Alf Sjöberg, drama con
Eva Dahlbeck, Olof Widgren y
Harriet Andersson, El séptimo sello (1957) de Ingmar Bergman, drama medieval premiado en Cannes, con Gunnar Björnstrand,
Bengt Ekerot,
Nils Poppe y Max von Sydow, Fresas salvajes (1957) de Ingmar Bergman, drama con Victor Sjöström, Gunnar Björnstrand e
Ingrid Thulin, En el umbral de la vida (1958) de Ingmar Bergman, drama con
Eva Dahlbeck e
Ingrid Thulin, también premiado en Cannes, El rostro (1958) de Ingmar Bergman, drama de época premiado en Venecia, con
Max von Sydow,
Ingrid Thulin y
Gunnar Björnstrand, El ojo del diablo (1960) de Ingmar Bergman, comedia dramática que protagonizó junto a
Jarl Kulle, En el jardín de las delicias (1961) de Alf Kjellin, comedia de época con
Sickan Carlsson y
Gunnar Björnstrand, El corto verano (1962) de Bjarne Henning-Jensen, drama con Jarl Kulle, La querida (1962) de
Vilgot Sjöman, drama con
Max von Sydow y
Per Myrberg por el que Andersson ganó el Oso de Oro a la mejor acrtriz en el Festival de Berlín, ¡Esas mujeres! (1964) de Ingmar Bergman, comedia con
Harriet Andersson y
Eva Dahlbeck, La isla (1966) de
Alf Sjöberg, drama con
Per Myrberg, Mi hermana, mi amor (1966) de
Vilgot Sjöman, drama que adaptaba la obra "¡Lástima que sea una puta!" del famoso autor isabelino John Ford, con Jarl Kulle,
Per Oscarsson y Gunnar Björnstrand, o, su primera pelicula norteamericana, Duelo en Diablo (1966) de Ralph Nelson, un western con
James Garner y
Sidney Poitier.
Su prestigio como actriz se incrementó y consolidó interpretando a la enfermera que cuida de la actriz
Liv Ullmann en el drama formalmente vanguardista Persona (1966) de Ingmar Bergman. La carrera de Andersson se internacionalizó en títulos como El gran amante (1966), comedia italiana dirigida y protagonizada por Alberto Sordi, junto con
Anita Ekberg,
Silvana Mangano y
Giulietta Masina, La seducción (1967) de Jacques Doniol-Valcroze, drama francés con
Bruno Cremer, Palmeras negras (1968) de Lars-Magnus Lindgren, comedia dramática con Max von Sydow y
Thommy Berggren, Las chicas (1968) de Mai Zetterling, drama con
Harriet Andersson y
Gunnel Lindblom, Pasión (1969) de Ingmar Bergman, drama con Liv Ullmann, Max von Sydow y
Erland Josephson, La carta del Kremlin (1970) de John Huston, thriller de espionaje con Richard Boone, Orson Welles, Max von Sydow, Patrick O'Neal y George Sanders, Historia de una mujer (1970) de Leonardo Bercovici, drama con
Robert Stack,
James Farentino y
Annie Girardot, La carcoma (1971) de Ingmar Bergman, drama triangular rodado en inglés con Elliott Gould y
Max von Sydow, Secretos de un matrimonio (1973) de Ingmar Bergman, drama con Liv Ullmann,
Erland Josephson y
Jan Malmsjö, Llueve sobre Santiago (1975) de Helvio Soto, drama con reparto internacional sobre la implantación de la dictadura chilena por el general Augusto Pinochet, Blondy (1976) de Sergio Gobbi, thriller erótico con Catherine Jourdan,
Mathieu Carrière y Rod Taylor, Nunca te prometí un jardín de rosas (1977) de Anthony Page, drama con Kathleen Quinlan, El enemigo del pueblo (1978) de George Schaefer, asaptación de la obra de Ibsen, con Steve McQueen y
Charles Durning, El amor en cuestión (1978) de André Cayatte, thriller con Annie Girardot, Quinteto (1979) de Robert Altman, distopía futurista con Paul Newman,
Vittorio Gassman y
Fernando Rey, Dos veces mujer (1979) de George Sluizer, drama con Anthony Perkins y
Sandrine Dumas, o Aeropuerto 79 (1979) de David Lowell Rich, film de catástrofe con reparto internacional encabezado por Alain Delon.
A partir de los años 80 la carrera cinematográfica de Bibi Andersson, bastante prolífica hasta entonces, comenzó a reducir su ritmo de producción, pero aún se la pudo ver en títulos como Me estoy sonrojando (1981) de Vilgot Sjöman, comedia con Larry Hagman, Un cebo llamado Elizabeth (1983) de James Toback, thriller con Nastassja Kinski y Rudolf Nureyev, Pobre mariposa (1986) de Raúl de la Torre, drama argentino con Graciela Borges, Lautaro Murúa, José Soriano y Víctor Laplace, El festín de Babette (1987) de Gabriel Axel, comedia dramática de época con Stephane Audran que fue el primer film danés en ganar el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa, Una estación de paso (1992) de Gracia Querejeta, drama de producción española, con Omero Antonutti y Joaquim de Almeida, El sueño de la mariposa (1994) de Marco Bellocchio, drama italiano con Thierry Blanc y Simona Cavallari, Nunca ocurre lo que uno espera (2000) de Måns Herngren y Hannes Holm, comedia con Gösta Ekman, o Arn: El caballero templario (2007) y su secuela Arn 2 (2008), ambas de Peter Flinth, aventuras medievales con Joakim Nätterqvist como protagonista.
Siempre ligada al teatro, donde también ha tenido una muy notable trayectoria interpretando clásicos, en la última etapa de su carrera asumió tareas de dirección teatral. En 1996 publicó su autobiografía. Una apoplejía en 2009, que la privó del uso de la palabra, obligó a su retiro.
Bibi Andersson contrajo matrimonio en tres ocasiones, siendo sus maridos el director y guionista Kjell Grede, con quien se casó en 1960, tuvo a su única hija, y de quien se divorció en 1973; Per Ahlmark, político liberal con quien estuvo casada desde 1979 hasta el divorcio en 1981; y Gabriel Mora Baeza, su esposo desde 2004.
A partir de los años 80 la carrera cinematográfica de Bibi Andersson, bastante prolífica hasta entonces, comenzó a reducir su ritmo de producción, pero aún se la pudo ver en títulos como Me estoy sonrojando (1981) de Vilgot Sjöman, comedia con Larry Hagman, Un cebo llamado Elizabeth (1983) de James Toback, thriller con Nastassja Kinski y Rudolf Nureyev, Pobre mariposa (1986) de Raúl de la Torre, drama argentino con Graciela Borges, Lautaro Murúa, José Soriano y Víctor Laplace, El festín de Babette (1987) de Gabriel Axel, comedia dramática de época con Stephane Audran que fue el primer film danés en ganar el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa, Una estación de paso (1992) de Gracia Querejeta, drama de producción española, con Omero Antonutti y Joaquim de Almeida, El sueño de la mariposa (1994) de Marco Bellocchio, drama italiano con Thierry Blanc y Simona Cavallari, Nunca ocurre lo que uno espera (2000) de Måns Herngren y Hannes Holm, comedia con Gösta Ekman, o Arn: El caballero templario (2007) y su secuela Arn 2 (2008), ambas de Peter Flinth, aventuras medievales con Joakim Nätterqvist como protagonista.
Siempre ligada al teatro, donde también ha tenido una muy notable trayectoria interpretando clásicos, en la última etapa de su carrera asumió tareas de dirección teatral. En 1996 publicó su autobiografía. Una apoplejía en 2009, que la privó del uso de la palabra, obligó a su retiro.
Bibi Andersson contrajo matrimonio en tres ocasiones, siendo sus maridos el director y guionista Kjell Grede, con quien se casó en 1960, tuvo a su única hija, y de quien se divorció en 1973; Per Ahlmark, político liberal con quien estuvo casada desde 1979 hasta el divorcio en 1981; y Gabriel Mora Baeza, su esposo desde 2004.
POSDATA
Bibi Andersson falleció en Estocolmo el 19 de abril de 2019 a la edad de 83 años.
Excelente!! Completa y rigurosa!
ResponderEliminarElla es divina!!
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