Gwen Verdon - Whatever Lola wants, Lola gets (Damn Yankees, 1958)

GWEN VERDON (Culver City, California, US, 13-1-1925 / Woodstock, Vermont, US, 18-10-2000): IN MEMORIAM

Hoy es aniversario natal de la actriz y bailarina estadounidense Gwen Verdon. En los años 50, 60 y 70 triunfó ampliamente en diversos musicales de Broadway, llegando a ser reconocida con cuatro premios Tony. Además de como la mejor bailarina del género, se la recuerda como musa y esposa del director y coreógrafo Bob Fosse. Lamentablemente el cine solamente aprovechó sus cualidades para el musical en la película Malditos yanquis (1958). En 1998 recibió la Medalla Nacional de las Artes de manos del entonces Presidente Bill Clinton.

Nacida Gwyneth Evelyn Verdon, fue la segunda de los dos hijos de un electricista de M.G.M. y una profesora de danza. De pequeña sufrió de raquitismo, lo que conllevó malformación de sus piernas y la obligó a precisar ortopedia. A los tres años su madre se encargó de que recibiera clases de baile, lo que con el tiempo hizo que sus piernas se fortaleciesen. Con seis años ya bailaba sobre la escena y en adelante estudió múltiples modalidades de danza. Desde su adolescencia apareció como extra en diversas películas. A los diecisiete años se quedó embarazada del periodista James Henaghan, con quien se tuvo que casar, naciendo su hijo Jim en 1943. Verdon dejó el baile para cuidar a su bebé, pero la pareja se divorciaría en 1947. Tras el divorcio ella confió a sus padres el cuidado del niño.

Más adelante trabajó cinco años como ayudante del coreógrafo Jack Cole, tanto en Broadway como en Hollywood. En esa época fue instructora de baile para estrellas como Jane Russell, Fernando Lamas, Lana Turner, Betty Grable o Marilyn Monroe. Tras años como chica de coro en diversos musicales de Broadway, el coreógrafo Michael Kidd le ofrecio el segundo rol femenino en el musical Can-can (1953), con canciones de Cole Porter. Por este papel Verdon ganó su primer premio Tony.  Seguidamente logró un triunfo clamoroso protagonizando el musical Damn Yankees (1955), con libreto de George Abbott y Douglass Wallop, y canciones de Richard Adler y Jerry Ross, función de la que se dieron 1019 representaciones y por la que consiguió su segundo Tony. Después, por New girl in town (1957), musical con libreto de George Abbott y canciones de Bob Merrill fue premiada con un tercer Tony.

Finalmente fue a Hollywood contratada por Warner Brothers para repetir el papel de Lola (que había estrenado tres años antes en Broadway) en la película Malditos yanquis (1958) de George Abbott y Stanley Donen, con Tab Hunter y Ray Walston. Por su interpretación fue candidata a un premio BAFTA pero su carrera cinematográfica no tendría continuidad hasta muchos años después y por otros derroteros. Verdon volvió al teatro, coincidiendo profesionalmente con el director y coreógrafo Bob Fosse que debutaba como tal en el musical Redhead (1959) con libreto de Dorothy Fields, Herbert Fields, Sidney Sheldon y David Shaw, y canciones de Albert Haque y Dorothy Fields. Esta obra le supuso a ella su cuarto Tony, además de su casamiento con Bob Fosse en 1960. De este segundo matrimonio nacería su hija Nicole en 1963. La infidelidades de Fosse condujeron a la separación de la pareja en 1971, que no obstante nunca llegó a divorciarse. De hecho ambos continuarían colaborando profesionalmente.

En 1966 interpretó, dirigida por su marido, el rol titular en el musical Sweet Charity, con libreto de Neil Simon inspirado en la película "Las noches de Cabiria" (1957) de Federico Fellini, y canciones de Cy Coleman y Dorothy Fields. Por esta obra Verdon obtuvo su quinta nominación al Tony. En su debut como director cinematográfico Bob Fosse la llevó a la pantalla en 1969 con Shirley MacLaine sustituyendo a su esposa, que Hollywood consideró no lo bastante famosa. En todo caso Gwen hubo de tragarse su orgullo y colaboró con su marido en las coreografías de "Noches en la ciudad" (entrenó personalmente a MacLaine), así como del siguiente film de Fosse, "Cabaret" (1972). Verdon y Fosse volvieron a trabajar juntos (ella como protagonista, él como director y coreógrafo) en el musical Chicago (1975), con libreto de Fred Ebb y Bob Fosse y canciones de John Kander y Fred Ebb, donde su interpretación de Roxie Hart le valió a Verdon su sexta nominación al premio Tony. Otros trabajos en teatro y cine de Fosse también contaron con la colaboración de su ex musa.

Años después actuó en papeles dramáticos de carácter en películas como Cotton Club (1984) de Francis Ford Coppola, Cocoon  (1985) de Ron Howard, Nadine (1987) de Robert Benton, Cocoon: El retorno (1988) de Daniel Petrie, Alice (1990) de Woody Allen, La habitación de Marvin (1996) de Jerry Zaks, Caminando por Egipto (1999) de Arthur Allan Seidelman, o Bruno (2000) de Shirley MacLaine, así como actriz invitada en episodios de diversas series televisivas.

Bob Fosse murió en 1987 y ella estuvo a su lado hasta el fin en el hospital. En adelante se convirtió en guardiana del legado artístico de su marido. Verdon falleció trece años después asímismo de un ataque cardiaco, cuando contaba 75 años de edad. Aquella noche del 18 de octubre las luces de Broadway se apagaron en su honor.

Gwen Verdon  seducía a Tab Hunter en la película Malditos yanquis (1958)  interpretando "Whatever Lola wants, Lola gets".