TRIBUTO A PLÁCIDO DOMINGO (Madrid, España, 21-1-1941)
El tenor español Plácido Domingo cumple hoy 76 años. Mundialmente aclamado como uno de los mejores cantantes de ópera del siglo XX, ha construido una muy larga y versátil carrera que comenzó en México en 1959. Receptor de innumerables galardones y reconocimientos en diversas partes del mundo, figuran entre ellos el Premio Príncipe de Asturias de las Artes (1991), Premio Kennedy Center (2000), Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil (2002), Orden del Imperio Británico (2002), Comendador de la Legión de Honor francesa (2002), Orden de las Artes y las Letras de España (2011), dos premios Emmy y siete premios Grammy en diferentes categorías.
Con sólo ocho años, José Plácido Domingo Embil se trasladó con su familia a Latinoamérica, donde sus progenitores (aragonés el padre, vasca la madre), cantantes
de zarzuela, tenían que realizar una gira en la compañía de Moreno
Torroba. Finalizada la gira, en 1950 decidieron quedarse en México,
donde se formaría el futuro tenor. El pequeño Plácido asistía a las funciones en que actuaban sus padres,
por lo que el mundo de la música pronto se le hizo familiar. Mientras cursaba sus estudios primarios empezó a estudiar solfeo y subió varias veces a interpretar papeles de niño en algunas obras.
Aunque su voz todavía no estaba formada, comenzó a cantar zarzuelas como
barítono. Su temperamento le llevó, en los años siguientes, de una actividad a
otra: fue jugador de fútbol, quiso ser torero, intervino en comedias
musicales, acompañó al piano a cantantes en salas de fiestas y recibió alguna que
otra oferta para hacer cine. Un amigo le sugirió que probase suerte en la ópera, y aunque pensaba que no tenía
voz para ello, Plácido aprendió varias romanzas y dio una audición en
la Academia de la Opera de México.
Durante su formación en el Conservatorio de la capital azteca se enamoró de una compañera de estudios, de nombre Ana María Guerra. Recién cumplidos los dieciséis años resolvió abandonar el hogar donde vivía con sus padres y hermana para fugarse con aquella muchacha;
primero, escondidos en el piso de uno de los hermanos mayores de ella
y, finalmente, unidos en matrimonio. Sus padres, cuando se enteraron de la
precipitada boda al regreso de una gira por Europa, buscaron a Plácido y
se lo llevaron a casa. El embrollo se arregló gracias a los suegros del
futuro divo, quienes prestaron un piso a la joven pareja para vivir. En 1958 tuvieron un hijo, José, pero poco después se separaron, obteniendo el divorcio al año siguiente. Domingo alternó después varios romances pasajeros hasta que comenzó a salir con una compañera, la soprano mexicana Marta Ornelas, con quien acabaría casándose en 1962. Antes había debutado como tenor protagonista en Monterrey en el papel de
Alfredo en La Traviata; en ese momento comenzó una fulgurante carrera que le llevaría a los principales escenarios del mundo. Informado de que en el Teatro de la Ópera de Tel Aviv necesitaban un tenor, una soprano y un barítono, Plácido y su mujer marcharon juntos a Israel a finales de 1962. Aunque el contrato era por seis meses, permanecieron allí dos años y medio.
El tenor participó en 280 funciones y su esposa en 150. Luego ella
abandonó la carrera en favor de su marido y su familia tras el nacimiento de sus hijos Plácido, Jr. (1965) y Álvaro (1968). De la estancia
de Plácido en Tel Aviv arranca su repertorio y su consolidación como
tenor.
A partir de entonces recorrió triunfalmente las óperas de todas las principales capitales del
mundo. Considerado como uno de los grandes tenores de su generación, ha
interpretado más de noventa papeles operísticos diferentes, haciendo gala de su enorme versatilidad.
Plácido Domingo tiene el don de dar notable realismo a sus interpretaciones
y su voz posee gran belleza y color. Ha destacado en los grandes roles del repertorio francés (Carmen, Sansón y Dalila, Werther) e italiano (Don Carlo, Otello, Tosca, Il trovatore, Turandot), cultivando con especial fortuna en la década de los 90 el drama wagneriano (Tannhäuser, Lohengrin, Parsifal), además de añadir óperas nuevas a su repertorio. Sus grabaciones superan el centenar de álbumes e incluyen no sólo ópera, sino zarzuela y gran variedad de otros populares géneros musicales.
Entre 1990 y 2003, en asociación artística con Luciano Pavarotti y José Carreras,
actuó en numerosas ocasiones en macroconciertos, bajo el epígrafe "Los
Tres Tenores". Su formación musical es muy
completa, y es maestro en todo aquello que tenga que ver con el mundo de
la música: asesora teatros, organiza grandes eventos, cultiva otros géneros ligeros, interviene en
películas... Ha protagonizado incluso la versión
cinematográfica de seis óperas. Más recientemente ha cambiado su tesitura de tenor por la de barítono y, cada vez con mayor frecuencia, se
dedica también a la dirección de orquesta. Asímismo se ha destacado por sus múltiples actividades filantrópicas. Con los hijos ya crecidos, su esposa Marta, a quien el artista reconoce como su mayor apoyo, y con la que lleva casi cincuenta y cinco años de convivencia, se ha dedicado después a la dirección escénica. Su hijo Plácido también es cantante.
En los últimos años Plácido Domingo ha tenido que afrontar diversos problemas importantes de salud: en 2010 fue operado de cáncer de colon, luego, en 2013, fue hospitalizado por una embolia pulmonar y en 2015 operado de la vesícula.
Quando le sere al placido es el aria de tenor más conocida de la ópera Luisa Miller de Giuseppe Verdi. Corresponde al Cuadro III del Acto II de la misma. En el video se puede apreciar su interpretación por Plácido Domingo en una Gala-Concierto de la UNESCO en París en 1989 dedicada a a los más de dieciséis millones de refugiados en el mundo. Le acompaña la Orquesta Nacional de Francia bajo la dirección de Lorin Maazel.
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