STEPHEN SONDHEIM: TRIBUTE TO A BROADWAY BABY:
El genial compositor estadounidense Stephen Sondheim (Nueva York,
22-3-1930) cumple hoy 84 años. De él puede decirse que es el último de
la estirpe de ilustres autores que hicieron grande el musical americano:
Irving Berlin, Jerome Kern, George Gershwin, Cole Porter o Richard
Rodgers. Al nacer décadas más tarde que ellos y comenzar su carrera
simultáneamente a la decadencia del género en la pantalla, tal vez es
menos conocido popularmente que sus
antecesores por haber sido sus obras menos trasladadas al cine (y con
menor fortuna). Ha sido, además un gran renovador del musical clásico.
Tras sus
inicios en la segunda década de los 50 como letrista de famosos
musicales como "West Side Story" o "Gypsy" musicalizados por Leonard
Bernstein o Jule Styne, en 1962, ya autor de letra y música, estrenó "A
funny thing happened on the way to the forum", un clamoroso éxito
ganador de cinco premios Tony y después llevado al cine por Richard
Lester en 1966 (en España lo titularon "Golfus de Roma").
De una página biográfica he traducido del inglés la reseña "Stephen Sondheim y el musical de concepto":
«Stephen Sondheim ha sido uno de los más exitosos autores en el teatro musical americano durante las últimas tres décadas del siglo XX. Tras una temprana colaboración como letrista con Leonard Bernstein en "West Side Story", utilizó su bagaje de poderoso entrenamiento musical y extenso conocimiento de la composición para desarrollar un nuevo estilo denominado 'musical de concepto'. Un musical de concepto es un espectáculo enfocado sobre un simple tema, a menudo sin una línea narrativa argumental manifiesta. Estos musicales reflejan variedad de perspectivas sobre un tópico particular y usan pequeños repartos con escenarios mínimos. Los primeros éxitos como compositor y letrista de Sondheim en el nuevo estilo incluyeron "Company" (1970), "Follies" (1971) y "A little night music" (1973).
Sondheim también estaba
intrigado por el reto de escribir música para representar un estilo
específico o un período histórico y, antes que establecer un simple
'estilo Sondheim', el dominio de una variedad de estilos se convirtió en
su marca de fábrica. Por ejemplo, "A little night music", cuya acción
transcurre a comienzos del siglo XX, presenta música compuesta en tiempo
de vals, el ritmo más popular de la época. Sondheim no se limitó a
imitar la música de ese periodo, sino que compuso nuevas canciones
usando la cadencia valsística que ofrecía una fresca interpretación de
la época.
Otra importante componente del estilo de escritura musical
de Sondheim es su fuerte focalización en los personajes y la trama. En
consecuencia, no demasiadas canciones suyas funcionan bien fuera de los
espectáculos para los que fueron concebidas y pocas ha llegado a ser
hits. Una notable excepción es "Send in the clowns" de "A little night
music", que ha sido grabada por gran cantidad de artistas. En 1976
Sondheim realizó una gran apuesta con una obra llamada "Pacific
Overtures", la historia de la forzada apertura por parte de la US Navy
de puertos japoneses en los 1860s. La música del espectáculo incluía
tradicionales instrumentos asiáticos y fue representada por un reparto
asiático, utilizando elementos del kabuki, una altamente estilizada
forma de teatro japonés. Tan provocativa y original manifestación
multicultural era rara en un musical broadwayano, por lo que la función
no fue bien recibida por el público.
Sondheim permanece en muchos
aspectos como descendiente de la edad de oro de Broadway. Su trabajo ha
llevado esa tradición musical en una dirección contemporánea que refleja
una severa contención de presupuestos junto a cambios en los gustos
musicales. Con todo, su escasez de canciones-hit y su complacencia por
mirar el lado más oscuro de la naturaleza humana con obras como "Sweeney
Todd" (1979), una historia con el canibalismo como tema argumental, no
siempre le han facilitado la popularidad. Su éxito con trabajos más
recientes como "Assassins" (1991) y "Passion" (1994), no obstante, aún
le sitúan en la vanguardia del teatro musical moderno".»
Añadamos que Sondheim es asímismo autor de otros musicales como "Anyone
can whistle" (1964), "Merrily we roll along" (1981), "Sunday in the
Park with George" (1984) o "Into the woods" (1987). Entre otros muchos,
ha ganado ocho premios Tony (más que ningún otro compositor), incluído
uno honorífico por el conjunto de su carrera, ocho premios Grammy, un
premio Pulitzer y un Oscar de Hollywood por su canción "Sooner o later"
que Madonna cantaba en la película "Dick Tracy" (1990) de Warren Beatty.
Personalmente, el musical suyo que prefiero es "Follies", al que
pertenecen canciones tan maravillosas como "Losing my mind", "I'm still
here", "Could I leave you?", "Who's that woman?" o la paradigmática
"Broadway baby", que en el video podemos apreciar en la candorosa
interpretación de Daisy Eagan, una niña-actriz de 12 años, durante el
espectáculo-homenaje "Sondheim: A celebration at Carnegie Hall" (1992).
POSDATA
Stephen Sondheim falleció el 26 de noviembre de 2021 en Roxbury, Connecticut, a los 91 años.
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