BELLA, EXÓTICA, DÚCTIL Y SENSIBLE
Hoy es aniversario natal de la actriz británica Merle Oberon. Bella, morena, de ojos almendrados, elegante y muy fotogénica, el productor Alexander Korda hizo de ella una de las mayores estrellas del cine británico, posición que afianzó después en el cine hollywoodense, donde trabajó con importantes directores como William Wyler, Ernst Lubitsch o Jacques Tourneur.
Reseña biográfica a partir de la página El Criticón:
Actriz cuya carrera destacó en las décadas de los años 30 y 40, Estelle
Merle O'Brien Thompson nació en la India, hija de un ingeniero ferroviario procedente de Irlanda del Norte (que murió en la guerra del 14), y una euroasiática procedente de Ceilán. Toda su infancia transcurrió en el subcontinente asiático hasta que en
1928 y a la edad de 17 años se trasladó con su familia a Inglaterra. Con el nombre de Queenie O'Brien trabajo en un club y actuó en roles menores en algunos films británicos. Su carrera despegó cuando el famoso productor y director Alexander Korda se fijó en ella y, tras incluirla en el reparto de Ensayo de boda (1932), le dió el papel de Ana Bolena en La vida privada de Enrique VIII (1933), película protagonizada por Charles Laughton que tuvo un gran éxito. Después de que Korda volviese a dirigirla en La vida privada de Don Juan (1934) junto a Douglas Fairbanks, la actriz sobresalió asímismo en La Pimpinela Escarlata (1935), otra producción de Korda, dirigida por
Harold Young, un clásico de aventuras coprotagonizado por Leslie Howard. Hollywood la reclamó para intervenir junto a Maurice Chevalier en El caballero del Folies Bergère (1935) de Roy Del Ruth, y con Fredric March y Herbert Marshall en El ángel de las tinieblas (1935), drama romántico producido por Samuel Goldwyn y dirigido por Sidney Franklin, por el que Oberon obtuvo una nominación al Oscar. Siguieron otros títulos importantes como Esos tres (1936) de William Wyler, melodrama basado en la obra The children's hour de Lillian Hellman, con Miriam Hopkins y Joel McCrea, Adorable enemiga (1936) de H.C. Potter, drama remotamente basado en la vida de Michael Collins, con Brian Aherne, El divorcio de la señorita X (1938) de Tim Whelan, una ingeniosa comedia sofisticada producida por Korda en la que tuvo a Laurence Olivier como oponente, El vaquero y la dama (1938) de H.C. Potter, western romántico que la emparejó a Gary Cooper, Cumbres borrascosas (1939) de William Wyler, adaptación de la novela de Emily Brontë, con Laurence Olivier en el papel de Heathcliff, que fue su film más famoso, En la luna (1939), otra comedia británica con producción de Korda y dirigida por Thornton Freeland, con Rex Harrison como pareja, o el drama de propaganda bélica El león tiene alas (1939), nuevamente una producción de Korda y London Films, con Ralph Richardson como coprotagonista. En el año 1937 sufrió un grave accidente de automóvil que casi le cuesta
su carrera cinematográfica, pero finalmente se quedó todo en unas
pequeñas cicatrices que no consiguieron afear su bello y exótico rostro. En 1939 Alexander Korda se convirtió en su primer marido. Tras seis años de matrimonio se divorciarían en 1945.
En los años 40 intervino en títulos como Viaje sin retorno (1940) de Edmund Goulding, drama romántico con George Brent, Lo que piensan las mujeres (1941) de Ernst Lubitsch, comedia con Melvyn Douglas y Burgess Meredith, Lydia (1941), drama producido por Korda con dirección de Julien Duvivier, otro de sus mejores papeles, El valor es lo primero (1943) de Dorothy Arzner, drama bélico con Brian Aherne, Jack el
Destripador (1944) de John Brahm, thriller de terror con George Sanders, Aguas turbias (1944) de André De Toth, noir gótico con Franchot Tone y Thomas Mitchell, Canción inolvidable (1944) de Charles Vidor, drama biográfico sobre Frédéric Chopin en el que Oberon interpretó a George Sand, con Paul Muni y Cornel Wilde, Noche en el paraíso (1946) de Arthur Lubin, exótico film sobre la antigua Grecia con Turhan Bey como el fabulista Esopo, Tentación (1946) de Irving Pichel, thriller con George Brent, Mi corazón te guía (1947) de John Cromwell, drama romántico con Dana Andrews y Ethel Barrymore, o Berlín Express (1948) de Jacques Tourneur, impactante thriller con Robert Ryan. En esa época su habitual director de fotografía fue Lucien Ballard, gran
técnico con el que Merle estuvo casada desde 1945 hasta 1949.
A partir de los años 50 sus participaciones cinematográficas se hicieron
escasas, pudiendo ser vista en títulos como 24 horas en la vida de una mujer (1952) de Victor Saville, adaptación del relato homónimo del escritor Stefan Zweig, Todo es posible en Granada (1954) de José Luis Sáenz de Heredia, producción española con Francisco Rabal, Desirée (1954) de Henry Koster, en donde interpretaba a Josefina al lado de Marlon Brando, que encarnaba la figura de Napoleón o Profundamente en mi corazón (1954) de Stanley Donen, biopic sobre el compositor americano Sigmund Romberg, interpretado por José Ferrer. Tras colaboraciones en producciones multiestelares como El Óscar (1966) de Russell Rouse e Intriga en el gran hotel (1967) de Richard Quine, Interval (1973) de Daniel Mann fue su último film.
Merle Oberon se casó en dos ocasiones más. En 1957 con el empresario
italiano Bruno Pagliai, con quien adoptó dos hijos, y en 1975, dos años después del divorcio de
Pagliai, con el actor de origen holandés Robert Wolders, a quien dejó
viudo el 23 de noviembre de 1979, fecha en la que Merle Oberon falleció a
causa de un ataque al corazón. Tenía 68 años.
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