jueves, 8 de mayo de 2014

Roberto Rossellini (Roma, 8-5-1906 / Roma, 3-6-1977): In memoriam

EL PADRE DEL NEORREALISMO

Roberto Rossellini, cineasta romano capital en la historia del cine, no sólo italiano sino mundial, nació tal día como hoy hace 108 años.
Perteneciente a una importante familia de empresarios cinematográficos, interrumpe sus estudios de Filosofía y Letras para trabajar como montador y director de cortometrajes en el Instituto Luce. Tras colaborar en algunos guiones, debuta como realizador de largos al final del ventenio fascista con La nave bianca (1941), un encargo propagandístico del Ministerio de Marina interpretado por actores no profesionales y supervisado por el director Francesco de Robertis, a la que siguen en línea similar Un pilota ritorna  (1942) y L'uomo della croce (1943), más cercanas a sus intereses documentalistas que a cualquier otra cosa.
Haciendo de la necesidad virtud, inventa el Neorrealismo, con la ayuda de los guionistas Sergio Amidei y Federico Fellini, en Roma, città aperta (1945), protagonizada por Aldo Fabrizi y Anna Magnani entre actores no profesionales. Esta película, clave en el devenir de ese movimiento y de la cinematografía universal, fue rodada con muy pocos medios en una Roma recién liberada de la ocupación alemana y narra una historia basada en hechos reales, apoyándose en el melodrama y el documental. Le siguió Paisà (1946), interesante colección de episodios sobre el final de la II Guerra Mundial, situados desde Sicilia hasta el Delta del Po, que pasan bastante inadvertidos en Italia, pero tienen gran repercusión mundial. Un tercer film completa su trilogía sobre la guerra, Germania, anno zero (1948), obra maestra en torno a la crisis de los valores morales en la posguerra, plasmada a través del suicidio de un adolescente entre las ruinas de Berlín.
L'amore (1948) es un díptico sobre la condición femenina que protagoniza Anna Magnani, formado por La voce umana, según la obra de Jean Cocteau, e Il miracolo, sobre un argumento de Fellini.
En 1948 Rossellini recibe una carta de Ingrid Bergman ofreciéndose a trabajar con él. Así comienza una de las más notorias (y escandalosas) historias de amor en el mundo del cine, con Ingrid y Roberto en la cumbre de su popularidad e influencia. Su primera colaboración fue en Stromboli, terra di Dio (1950), excelente retrato de una mujer desplazada e incomprendida en un medio hostil.
Con Francesco, giullare di Dio (1950) sienta las bases para un nuevo estilo de cine histórico. La macchina ammazzacattivi (1952) y Dov'è la libertà (1954) son dos muestras de su modo de entender 'la comedia a la italiana'. La excelente Europa '51 (1952), segundo film con la Bergman, es un drama que inaugura sus personales análisis de la burguesía italiana. Con Viaggio in Italia (1953), uno de sus mejores trabajos, de nuevo con Ingrid Bergman, consigue una atinada descripción de una crisis matrimonial que la misma célebre pareja estaba viviendo. El fracaso comercial de la mayoría de estas grandes obras, unido al de La paura (1954), sobre una novela de Stefan Zweig, donde vuelve a insistir sobre la desolación moral existente en la Europa de la posguerra y Giovanna d'Arco al rogo (1954), sobre el oratorio de Paul Claudel, que además son sus últimos trabajos con Ingrid Bergman, le devuelven a sus orígenes neorrealistas con el documental India (1958).
Su mala situación económica le obliga a rodar, en contra de sus principios documentales y neorrealistas, Il generale della Rovere (1959), sobre un cuento de Indro Montanelli, donde reconstruye la última etapa de Roma bajo la ocupación nazi. Protagonizada por Vittorio de Sica, la película gana el León de Oro de la Mostra de Venecia y su éxito le conduce a una operación similar en Era notte a Roma (1960). Sus últimas películas son las reconstrucciones históricas Viva L'Italia (1961), biografía de Giuseppe Garibaldi, y Vanina Vanini (1961), basada en varias narraciones de Stendhal, así como la comedia dramática Anima nera (1962), sobre una obra teatral de Giuseppe Patroni Griffi.
Cansado de las cada vez mayores limitaciones que encuentra en el cine y fascinado por las que cree inmensas posibilidades que ofrece la televisión, es el único de los grandes cineastas que cambia un medio por otro. Entre sus largas y curiosas series didácticas L'età del ferro (1965) y La lotta dell'uomo per la sua sopravvivenza (1970) realiza su obra maestra para la televisión, La presa di potere di Luigi XIV (1967), donde aplica con especial habilidad sus desarrolladas teorías documentales a la reconstrucción histórica. La mayoría de sus últimos telefilms, Socrate (1971), Blaise Pascal (1972), Agostino d'Ippona (1972), Cartesius (1974), Il Messia (1976), son atractivas biografías, realizadas con grandes intenciones didácticas y demasiado poco presupuesto.
Roberto Rossellini, tras conseguir la nulidad eclesiástica de su matrimonio con la actriz de origen ruso Assia Noris, estuvo casado entre 1936 y 1950 con Marcella de Marchis, una diseñadora de vestuario, con quien tuvo dos hijos varones, Romano y Renzo. De su relación con Ingrid Bergman nacieron Roberto, y las gemelas Isabella e Isotta. La primera de ellas, sería conocida modelo y actriz. Su última esposa, que permaneció con él los últimos veinte años de su vida, fue la hindú Sanali Das Gupta, con quien adoptó a su hijo Gil y tuvo una hija, Raffaella. Asímismo era el hermano mayor del músico Renzo Rossellini. Un ataque al corazón acabó con la vida del cineasta a los 71 años.


1 comentario:

  1. Para mí, fascinante resumen biográfico de este grande de la dirección cinematográfica.

    ResponderEliminar