martes, 9 de abril de 2019

Tributo a Isabel Coixet (Barcelona, España, 9-4-1960)

DIRECTORA ATÍPICA, INCONFORMISTA Y POLÉMICA

La cineasta española Isabel Coixet cumple hoy 59 años. De formación autodidacta en el mundo de la publicidad, la cuidadosa estética de sus películas deriva de sus antecedentes en ese medio. Su universo personal aglutina una inconformista visión del mundo, feminismo, compromiso social y político, abordando como temas recurrentes la incomunicación entre los seres humanos, el amor y la soledad, todo ello con un estilo definido como 'inclasificable' por el New York Times. Ha rodado películas (la mayoría en lengua inglesa) en diferentes partes del mundo. Pese a los altibajos de su filmografía, figura entre los directores españoles actuales que más interés producen en la crítica, a menudo dividida a favor y en contra de sus creaciones.  Asímismo productora desde el año 2000, dos de sus obras, La vida secreta de las palabras (2005) y La librería (2017) consiguieron el premio Goya a la mejor película, recibiendo ella otros tantos como directora, además de tres como guionista y otro al mejor documental por Escuchando al juez Garzón (2011). En 2015 el Ministerio de Cultura francés la nombró Caballero de las Artes y las Letras.
Isabel Coixet Castillo vivió en su adolescencia durante un tiempo con su abuela, taquillera en una sala de cine en el barrio donde nació. Pasó mucho tiempo viendo todo tipo de películas una y otra vez. Profesionalmente entró en contacto con el cine en 1977 a través de una productora publicitaria. Desde ese momento realizó crítica cinematográfica, anuncios y videoclips, trabajando asímismo como periodista en la revista Fotogramas. En 1984 realizó su primer cortometraje, Mira y verás, y tras licenciarse en Historia de los siglos XVIII y XIX por la Universidad de Barcelona, fundó una agencia de publicidad donde realizó diferentes trabajos relacionados con el mundo de la imagen.
Su debut en el largometraje se produjo con Demasiado viejo para morir joven (1989), drama con Gerardo Arenas, Emma Suárez y Emilio Laín que obtuvo escasa repercusión pero por el que Coixet fue candidata al premio Goya en la categoría de mejor dirección novel. Posteriormente se traladó a Estados Unidos para rodar Cosas que nunca te dije (1996), un delicado drama romántico con  Lili Taylor y Andrew McCarthy muy bien acogido por la crítica, volviendo a España para dirigir en Galicia A los que aman (1998) un cautivador drama romántico de referencias stendhalianas con Julio Núñez, Patxi Freytez, Olalla Moreno, Monica Bellucci, Christopher Thompson, Albert Plà, Amanda García y Gary Piquer
Mayor repercusión logró Mi vida sin mí (2003), sensible drama de coproducción hispano-canadiense sobre una joven madre que decide ocultarle a su familia que tiene un cáncer terminal, con Sarah Polley, Amanda Plummer, Scott Speedman, Leonor Watling, Deborah Harry, María de Medeiros y Mark Ruffalo, film por el que ganó el Goya al mejor guión adaptado. Su consagración llegó con La vida secreta de las palabras (2005), drama sobre la relación en una plataforma petrolífera en alta mar entre un hombre accidentado con la enfermera que le cuida, con Sarah Polley, Tim Robbins y Javier Cámara, cinta ganadora de cuatro premios Goya (mejor película, dirección, guión original y diseño de producción). No lograron un impacto semejante sus siguientes largometrajes de ficción: Elegy (2008), drama adaptador de una novela de Philip Roth, con Penélope Cruz y Ben Kingsley, Mapa de los sonidos de Tokio (2009), drama rodado en Japón con Rinko Kikuchi y Sergi López, Ayer no termina nunca (2013), drama sobre los efectos de la crisis económica en una pareja que perdió a su hijo, con Javier Cámara y Candela Peña, Mi otro yo (2013), thriller psicológico británico con Sophie Turner, y Aprendiendo a conducir (2014), comedia dramática en Nueva York con Patricia Clarkson y Ben Kingsley. En cambio, Nadie quiere la noche (2015), drama de supervivencia en el Polo Norte basado en hechos reales, con Juliette Binoche, Rinko Kikuchi y Gabriel Byrne, sumó nueve nominaciones a los premios Goya (entre ellas a la mejor película y dirección), ganado cuatro de los llamados técnicos. 
El éxito volvió a sonreirle ampliamente con La librería (2017), drama rural ambientado en la Inglaterra de 1959, con Emily Mortimer, Bill Nighy y Patricia Clarkson, que de doce candidaturas a los Goya consiguió los de mejor película, dirección y guión adaptado. Su última película por el momento, Elisa y Marcela (2019), drama con Natalia de Molina y Greta Fernández, narra la historia real de dos maestras gallegas que en 1901 se casaron por la Iglesia, para lo cual una de ellas tuvo que hacerse pasar por hombre.
Mención aparte merecen sus documentales, que expresan sus puntos de vista sobre temas sociales o políticos y denuncian injusticias en el mundo, entre ellos Viaje al corazón de la tortura (2003), Escuchando al juez Garzón (2011), premiado con un Goya, o España en un día (2016).
La pareja sentimental de Isabel Coixet es el músico madrileño César Sala, conocido también como Chop Suey, con quien en 1997 tuvo a su hija Zoe.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario