El cantante italiano Tony Dallara cumple hoy 82 años. Con inconfundible timbre de voz, entre 1957 y 1967 fue un popular urlatore, denominación que en su país de origen se daba a los intérpretes que se desenvolvían cantando en tonos muy altos. Vencedor en Sanremo 1960, también lo fue dos veces consecutivas en Canzonissima y tuvo notables éxitos fuera de Italia grabados en varias lenguas. En la actualidad es el superviviente más anciano de cuantos ganaron el Festival de Sanremo.
Hijo de un corista de la Scala de Milán y una ex ama de llaves, Antonio Lardera (su nombre real) se crió en la ciudad de Milán. A poco de dejar la escuela tuvo que ponerse a trabajar, primero en un bar y después como empleado. Admirador de la música popular americana, decidió formar el grupo I Campioni para debutar profesionalmente como cantante. En 1957 trabajaba como recadero para una casa discográfica y su director, tras escuchar en una actuación a Antonio y sus compañeros, decidió contratarlos, editando sus discos bajo el nombre de Tony Dallara con I Campioni, formación que llegaría a publicar más de dos decenas de singles, hasta que su voz solista se independizó para grabar con orquesta dos años después.
Su primer gran éxito fue Come prima (1957), que alcanzó el nº 1 de las listas italianas y vendió 300.000 copias, todo un record para la época. La canción se hizo muy popular también fuera de Italia, particularmente en España y Latinoamérica (por Los 5 Latinos), Francia (con versión francesa de Dalida), Gran Bretaña (registrada en inglés por Malcolm Vaughan) y Estados Unidos (con versiones a cargo de Dean Martin o The Platters). Mientras Tony cumplía el servicio militar se sucedieron otros éxitos como Ti dirò (1958), Brivido blu (1958, Per un bacio d’amor (1958), Non partir (1958), Julia (1959) o Ghiaccio bollente (1959). En esos años y los siguientes, Dallara también apareció en varias películas de las llamadas musicarelli.
El espaldarazo definitivo a su carrera se lo dió su participación en el Festival de Sanremo 1960 con las canciones Noi (7º puesto) y, sobre todo, Romantica (ganadora), también interpretadas respectivamente por Jula de Palma y Renato Rascel. Siendo Dallara y Rascel debutantes en el certamen, el segundo, uno de los autores de Romantica, la cantó después en el Festival de Eurovisión con escasa fortuna, pero en la voz de Dallara fue nº 1 en Italia y se convirtió en el mayor éxito internacional de toda su discografía. Incluso con la misma fue ganador en Canzonissima, concurso televisivo que al año siguiente vencería de nuevo con Bambina bambina. Entre una edición y otra de dicho programa, participó junto a Gino Paoli en Sanremo 1961 con Un uomo vivo, clasificada décima en la final, y logró su tercer nº 1 en Italia con su versión de La novia, anteriormente popularizada en castellano por el chileno Antonio Prieto en los países de habla hispana. Otro éxito de entonces fue Norma (1962). En 1964, por tercera y última vez concurrió en Sanremo con Come potrei dimenticarti, que llevó a la final en doble ejecución con Ben E. King.
A medida que su popularidad en Italia disminuía, Tony Dallara probó suerte en el mercado hispanoparlante, grabó discos en castellano y se presentó con éxito en varios festivales españoles. Así en el de la Canción Mediterránea de Barcelona, donde en 1965 fue segundo junto a Pino Donaggio con Si chiama Maria; en el de Mallorca, que venció en 1966 con Margarita y en 1970 con E' colpa mia, o el de Benidorm, en el que la canción Entre los dos, interpretada por él y la española Bettina, consiguió el primer premio en 1967.
El auge de la música beat y los cambiantes gustos del público marcaron una sensible merma en la venta de sus discos, por lo que Dallara se fue alejando del mundo musical para dedicarse a la pintura. Ocasionalmente, merced a diversas operaciones revivalistas en los años 80 y 90, efectuó algunas reapariciones discográficas y, ya en el siglo XXI, como contertulio televisivo.
Los dos primeros premios consecutivos logrados por Domenico Modugno en Sanremo en las ediciones de 1958 y 1959 con "Nel blu dipinto di blu" y "Piove" habían propiciado una gran proyección internacional del Festival de la canción italiana. Desde 1955 la red de Eurovisión venía transmitiendo la final del mismo y en 1960 ya contaba con una amplia expectación. Alrededor de treinta millones de europeos presenciaron en sus televisores el triunfo de Romantica, composición de Dino Verde (letra) y Renato Rascel (música) que en la voz de éste último y Tony Dallara arrolló en la finalissima contra todo pronóstico. Detrás quedaron las canciones presentadas por Modugno (el favorito), Joe Sentieri, Nilla Pizzi o Mina. La versión de Dallara resultó luego un gran éxito dentro y fuera de Italia y, a comienzos de 1961, el cantante consiguió con ella su primera victoria en Canzonissima. Romantica fue popularizada en francés por Dalida y en inglés por Jane Morgan y se tradujo a diversas lenguas, incluido el japonés.