sábado, 17 de junio de 2017

Tribute to Ken Loach (Nuneaton, Warwickshire, England, UK, 17-6-1936)

REBELDE CON CAUSA

El director británico Ken Loach cumple hoy 81 años. Su cine, sin estrellas, de marcado contenido crítico y social, se ocupa por lo común de los problemas de la clase obrera y manifiesta repetidamente el claro propósito de agitar la conciencia del espectador. Su obra es indisociable de su discurso político, que pone en el foco la incapacidad del sistema para garantizar el bienestar de los ciudadanos y la falta de empatía institucional con los menos afortunados o excluídos. Con cincuenta años de carrera a sus espaldas, es un cineasta independiente y comprometido donde los haya, en las antípodas de Hollywood. Si en la meca del cine las productoras apuestan por un cine evasivo y en el que no haya mucho que pensar o, a lo sumo, por historias de superación o sentimentales, que hagan llorar pero a la vez sentirse bien, Loach obliga al espectador a mirar hacia los márgenes de la sociedad y le hace corresponsable de las conflictivas situaciones mostradas. A veces acusado de falta de preocupación formal y, frecuentemente, de maniqueo, su marca distintiva es el realismo, sus protagonistas gente corriente (y generalmente malhablada), su preocupación los desfavorecidos, y su objetivo subvertir los cimientos del stablishment. Controvertidas desde sus inicios, la mayoría de sus películas, han sido aupadas en festivales cinematográficos, dos de ellas han ganado la Palma de Oro en Cannes, bastantes receptoras de premios internacionales y Loach reconocido con el Oso de Oro honorífico en el Festival de Berlín de 2014.
Después de estudiar en la King Edward VI Grammar School, Kenneth Charles Loach empezó Derecho en la Universidad de Oxford, carrera que abandonó para volcarse en el teatro, participando como actor en un grupo estudiantil de repertorio. En los años 60 trabajó habitualmente en televisión, medio en el que, como documentalista, comenzó a mostrar sus expresiones realistas y preocupaciones sociales. La visión de "Ladrón de bicicletas" (1948) de Vittorio De Sica, "Los amores de una rubia" (1965) de Milos Forman y "La batalla de Argel" (1966) de Gillo Pontecorvo hizo que se decidiera a convertirse en cineasta.
Debutó en el cine con Pobre vaca (1967), drama social sobre la vida de una joven madre, con Carol White y Terence Stamp, a la que siguieron Kes (1969), drama familiar e iniciático centrado en un adolescente (David Bradley) que padece abusos dentro y fuera de su casa y se hace experto en cetrería (hoy considerado en su país uno de los mejores films británicos de cualquier época), y Family life (1971), drama familiar y social con Sandy Ratcliff como una joven víctima de la presión de sus padres y las instituciones sanitarias. Con problemas para distribuir sus películas, Loach volvió a la televisión y tardó ocho años en rodar una nueva, Black Jack (1979), drama ambientado en el siglo XVIII. La misma tónica continuó en los años 80, década a lo largo de la cual se mantuvo más especializado en sus trabajos televisivos, estrenando en la gran pantalla El guardabosque (1980), drama con Phil Askham, Miradas y sonrisas (1981), drama social con Graham Green, Tony Pitts y Carolyn Nicholson, y La tierra de mi padre (1986), docudrama sobre un cantautor alemán interpretado por Gerulf Pannach que pasó casi inadvertido.
En los años 90 se produjo un punto de inflexión en su filmografía: Agenda oculta (1990), lúcido y sobrio thriller político sobre dos abogados norteamericanos investigadores del trato recibido por los presos del IRA en Belfast, con Frances McDormand, Brian Cox y Brad Dourif, ganó el Premio Especial del Jurado en el Festival de Cannes y logró amplia aclamación crítica (hoy es, probablemente, su mejor película). A partir de ella, sus siguientes obras incrementaron considerablemente el interés de los críticos y el público, básicamente en Europa: Riff-raff (1991), drama social con Robert Carlyle y Emer McCourt que ganó el Premio del Cine Europeo a la mejor película, Lloviendo piedras (1983), drama social con Bruce Jones, Julie Brown, Ricky Tomlinson, Tom Hickey y Gemma Phoenix que de nuevo logró el Premio Especial del Jurado en Cannes, Ladybird, Ladybird (1994), duro y estremecedor drama social basado en hechos reales sobre una madre soltera que sufre continuas agresiones institucionales y lucha por la custodia de sus hijos, con Crissy Rock, Vladimir Vega, Ray Winstone y Sandie Lavelle, Tierra y libertad (1995), drama histórico ambientado en la guerra civil española, con Ian Hart, Rosana Pastor, Icíar BollaínTom Gilroy y Marc Martínez premiado en Cannes por la crítica internacional, que además ganó el César a la mejor película extranjera y el Félix a la mejor película europea, La canción de Carla (1996), drama con la revolución sandinista como telón de fondo, con Robert Carlyle, Oyanka Cabezas y Scott Glenn, y Mi nombre es Joe (1998), drama social donde vuelve al ambiente obrero inglés, con Peter Mullan y Louise Goodall.
Los años siguientes añaden a su filmografía Pan y rosas (2000), drama sobre dos hermanas mexicanas emigrantes en los Estados Unidos, con Pilar Padilla, Adrien Brody y Elpidia Carrillo, La cuadrilla (2001), otro drama social sobre temas laborales, con Dean Andrews, Tom Craig, Joe Duttine, Steve Huison, Venn Tracey y Sean Glenn, Felices dieciséis (2002), drama social sobre la pérdida de inocencia de un adolescente precipitado en un camino equivocado, con Martin Compston, Annmarie Fulton y William Ruane, Sólo un beso (2004), drama sobre una profesora católica que se enamora de un musulmán y la intolerancia religiosa y cultural que les rodea, con Atta Yaqub y Eva Birthistle, y El viento que agita la cebada (2006), drama ambientado en la lucha revolucionaria en 1920 por la independencia de Irlanda, con Cillian Murphy, Liam Cunningham y Padraic Delaney que ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes.
A estas alturas, en general y con algunas excepciones, el consenso crítico en torno a su obra restante disminuyó en cierta medida (se le ha tildado de repetitivo). Sus últimos títulos incluyen En un mundo libre (2007), drama que aborda temas como inmigración y desempleo, con Kierston Wareing, Juliet Ellis y Leslaw Zurek, Buscando a Eric (2009), comedia dramática que mezcla fútbol y problemas sociales, con Steve Evets, Eric Cantona, John Henshaw y Stephanie Bishop, Route Irish (2010), drama sobre las consecuencias de la querra de Iraq en dos soldados británicos, con Mark Womack y Andrea Lowe, La parte de los ángeles (2012), comedia social con Paul Brannigan, Roger Allam, John Henshaw y William Ruane, El espíritu del 45 (2013), documental sobre los logros de la política laborista después de la Segunda Guerra Mundial y su desmantelamiento a partir de 1979 por los gobiernos de Margaret Thatcher y epígonos, Jimmy's hall (2014), drama político basado en hechos reales en la Irlanda de comienzos de los años 30, con Barry Ward, Simone Kirby, Jim Norton, Francis Magee, Aisling Franciosi, Andrew Scott y Brían F. O'Byrne, y Yo, Daniel Blake (2016), drama social con Dave Johns y Hayley Squires que denuncia la maraña administrativa actual de Gran Bretaña (para muchos, 'la película' de la crisis), que se ha convertido en su obra más premiada: Palma de Oro en Cannes, BAFTA a la mejor película británica, César a la mejor película extranjera y David di Donatello a la mejor película europea, entre otros reconocimientos, además de constituir su mayor éxito comercial en su país.
Desde 1962 hasta el presente permanece casado con Lesley Ashton, que le ha dado cinco hijos, el segundo de los cuales falleció en 1971 a los seis años en accidente de circulación. En 1977 Ken Loach declinó el nombramiento de Oficial de la Orden del Imperio Británico.




1 comentario:

  1. No tenía información de Loach ni distinguí sus películas. Instructiva reseña.

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