Tribute to Cybill Shepherd (Memphis, Tennessee, US, 18-2-1950)

LA PRIMERA MUSA DE BOGDANOVICH

La actriz estadounidense de cine y televisión Cybill Shepherd cumple hoy 67 años. Delicada belleza rubia a lo Grace Kelly, con sólo 21 años se convirtió en un rostro conocido internacionalmente por su aparición en La última película (1971) de Peter Bogdanovich. Luego su carrera cinematográfica no cumplió las expectativas en ella depositadas y no fue hasta ya cercana a la madurez que logró el estrellato en la televisión, medio en el que ganó tres Globos de Oro.

Nacida en el seno de una familia de clase media, Cybill Shepherd empezó de adolescente a trabajar como modelo. A los dieciséis años ganó el concurso Miss Teenage Memphis y a los dieciocho fue Modelo del Año. Según su autobiografía, en 1970 fue descubierta en la portada de la revista Glamour por el cineasta Peter Bogdanovich, quien le ofreció el papel de Jacy Farrow en La última película (1971), drama rural basado en una novela de Larry McMurtry que habría de lanzar las carreras de sus tres jóvenes protagonistas: Timothy Bottoms, Jeff Bridges y la propia Cybill Shepherd, además de relanzar las de Ellen Burstyn, Ben Johnson y Cloris Leachman. Filmado en blanco y negro, Bogdanovich consiguió con este film la obra maestra de su carrera. Adicionalmente a resultar un gran éxito de público y crítica, la producción fue candidata al Oscar en ocho categorías y lo ganó en dos.

Ante Cybill se abría un prometedor futuro, que pareció confirmar su protagonismo en El rompecorazones (1972) de Elaine May, comedia romántica con Charles Grodin que adaptaba una obra de Neil Simon. Sin embargo, sus dos películas siguientes, ambas dirigidas por Peter Bogdanovich (de quien se había convertido en algo más que musa) fueron sendos fracasos. Ni Una señorita rebelde (1974), drama de época que adaptaba una novela de Henry James, con Barry Brown, Mildred Natwick, Eileen Brennan, Duilio Del Prete y Cloris Leachman, ni Por fin el gran amor (1975), pretendido homenaje a los musicales de Hollywood en los años 30 con canciones de Cole Porter, donde compartió créditos con Burt Reynolds, consiguieron el aprecio de público y crítica. La reputación del director quedó dañada y la trayectoria de Cybill en un impasse. La actriz pudo encauzar su carrera cuando supo que Martin Scorsese buscaba a alguien de sus características para dar vida a Betsy, la chica cortejada por Robert De Niro en el impactante drama Taxi driver (1976) y ella se ofreció para el papel. Scorsese decidió apostar por Cybill, pese a la oposición de los productores y de Robert De Niro, que la odió desde el primer momento porque consideraba que era muy poco competente. Según la Shepherd, De Niro no la podía ni ver porque ella no quiso acostarse con él. Taxi driver se convirtió en todo un éxito y lograría la Palma de Oro en Cannes, aunque el trabajo de la rubia no fue lo mejor considerado. Escasa repercusión lograron sus siguientes películas: Correo especial (1976) de Paul Wendkos, comedia criminal con Bo Svenson, Gigantes de plata (1978) de Ivan Passer, comedia criminal con  Michael Caine, Louis Jourdan y Stéphane Audran, La dama del expreso (1979) de Anthony Page, remake de "Alarma en el expreso" (1938) de Hitchcock, con Elliott Gould, Angela Lansbury y Herbert Lom, o El regreso de los extraterrestres (1980) de Greydon Clark, thriller de ciencia-ficción con Jan-Michael Vincent, Martin Landau y Raymond Burr. Parecía claro que Shepherd no se convertiría en una estrella de cine en Hollywood.

Después de recibir lecciones de arte dramático en el estudio de Stella Adler, pidió consejo a Orson Welles, (a quien había conocido a través de Bogdanovich), que le recomendó adquirir experiencia escénica frente al público en teatros alejados de Nueva York o Los Angeles. Así fue como Cybill regresó a su Memphis natal para entrenarse en compañías de teatro regionales. Después decidió concentrar sus esfuerzos en la televisión. Además de diversos telefilms, protagonizó las series "La rosa amarilla" (1983-84) y "Luz de luna" (1985-1989). Con esta última, en la que Bruce Willis fue coestrella, consiguió el ansiado triunfo, ganó dos Globos de Oro a la mejor actriz de comedia y se convirtió en una actriz respetada. Volvió a la gran pantalla en El cielo se equivocó (1989) de Emile Ardolino, comedia romántica con Robert Downey Jr., Ryan O'Neal y Mary Stuart Masterson, a la que sucedió Texasville (1990) de Peter Bogdanovich, apreciable secuela de La última película, donde además de Cybill, retomaban sus roles originarios Jeff Bridges, Cloris Leachman, Timothy Bottoms, Randy Quaid y Eileen Brennan. También se la pudo ver en Alice (1990) de Woody Allen, comedia romántica con Mia Farrow, Joe Mantegna y William Hurt, Casado con eso (1991) de Arthur Hiller, comedia con Beau Bridges, Stockard Channing, Robert Sean Leonard, Mary Stuart Masterson y Ron Silver, o Sólo falta el asesino (1992) de Eugene Levy, comedia negra con John Candy, James Belushi, Sean Young, Richard Lewis, Ornella Muti, Giancarlo Giannini y George Hamilton, pero ninguna de estas películas fueron éxitos de taquilla.

La actriz optó de nuevo por la televisión y volvió a ganar un Globo de Oro por la serie "Cybill" (1995-1998). Luego regresó esporadicamente al cine (en títulos menores), grabó discos y ha seguido actuando en televisión. Mas recientemente Peter Pogdanovich volvió a darle un papel en la comedia Lío en Broadway (2014).

Después de que finalizase su relación sentimental con Peter Bogdanovich (que había dejado a su esposa Polly Platt por ella), Cybill Shepherd se casó en 1978 con el entertainer David M. Ford, con quien tuvo una hija en 1979 y de quien se divorció en 1982. Su segundo marido fue el quiropráctico Bruce Oppenheim, con quien contrajo matrimonio en 1987, naciendo de la union ese mismo año dos gemelos, una niña y un niño, aunque el divorcio llegó en 1990. En el año 2000 se publicó su autobiografía. Cybill, que incluso ha superado un melanoma, es abuela desde 2014.