lunes, 23 de marzo de 2015

Ugo Tognazzi (Cremona, Italia, 23-3-1922 / Roma, Italia, 27-10-1990): In memoriam

COMEDIANTE INCANSABLE
 
Hoy es aniversario natal del actor italiano Ugo Tognazzi, uno de los más grandes y prolíficos intérpretes de comedias en su país. Su extensísima filmografía ronda las 150 películas y abarca cuatro décadas, manteniendo en las tres últimas una gran popularidad en Italia. De comicidad ácida y socarrona, trabajó en radio, teatro, music hall, televisión y cine, dirigiendo asímismo cinco películas. Ganó tres David di Donatello y cuatro Nastri d'argento, además de un premio al mejor actor en Cannes.

Reseña ampliada a partir de la página Biografías y Vidas:

Nacido en el seno de una familia burguesa, Ugo Tognazzi participó por primera vez en un espectáculo teatral cuando apenas tenía cinco años, en una representación organizada en Bérgamo, donde su familia se había instalado poco antes. A los catorce regresó a su ciudad natal y comenzó a trabajar en una fábrica de embutidos. Con el dinero que ganaba en este empleo se fue costeando los estudios de arte dramático, pese a la oposición de sus padres.
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial se dedicó a organizar, con un grupo de aficionados, una serie de espectáculos teatrales para los soldados italianos. Finalizada la contienda, prosiguió su trabajo como actor de teatro y trasladó su residencia a Milán, donde hizo su debut profesional en 1945, con la revista Vivan las mujeres. Después, y durante un tiempo, se dedicó de lleno a la comedia musical.
Su primer trabajo para el cine fue un papel en el film Los cadetes de Gascuña (1950), dirigido por Mario Mattoli. En la siguiente década intervino en numerosas películas, aunque generalmente interpretando personajes secundarios. La ocasión para afirmar su talento le llegó con la película de  El federal (1961) de Luciano Salce, en la que Tognazzi encarnaba a un fascista de la vieja guardia, a la que siguieron títulos como ¡Qué alegría vivir! (1961) de René Clément, El mantenido (1961), que él mismo dirigió, El día más corto (1962) de Sergio Corbucci, El deseo loco (1962) de Luciano Salce, La marcha sobre Roma (1962) de Dino Risi, Liolà (1963) de Alessandro Blasetti, Monstruos de hoy (1963) de Dino Risi o Las horas del amor (1963) de Luciano Salce. A partir de entonces se convirtió en el actor favorito de Marco Ferreri, con el que rodó La abeja reina (1963), film con el que logró reconocimiento internacional, y Se acabó el negocio (1964). A continuación vendrían otras cintas de éxito como Celos a la italiana (1964), con Claudia Cardinale, y Yo la conocía bien (1965), con Stefania Sandrelli, ambas de Antonio Pietrangeli, Ménage a la italiana (1965) de Franco Indovina, con Maria Grazia Buccella, Dalida, Romina Power y Anna Moffo, Hoy, mañana, pasado mañana (1965), comedia de tres episodios, donde aparecía en el dirigido por Marco Ferreri, Una cuestión de honor (1966) de Luigi Zampa, con  Nicoletta Machiavelli, Marcha nupcial (1966) de Marco Ferreri, con Shirley Anne Field, Qué dulce es morir así (1966), también dirigida por él, Muchas cuerdas para un violín (1967) de Pietro Germi, con Stefania Sandrelli, El padre de familia (1967) de Nanni Loy, con Nino Manfredi, Leslie Caron y Claudine Auger, Barbarella (1968) de Roger Vadim, con Jane Fonda y John Phillip Law, Abrázame y sáciame de besos (1968) de Dino Risi, con Nino Manfredi y Pamela Tiffin, El fiel servidor (1968) de Tognazzi, con Maria Grazia Buccella, El comisario y la dolce vita (1969) de Ettore Scola, El poder no perdona (1969) de Luigi Magni, o Pocilga (1969) de Pier Paolo Pasolini.
En los años 70 continuó en primer plano con La califa (1970) de Alberto Bevilacqua, Venga a tomar café con nosotras (1970) de Alberto Lattuada, En nombre del pueblo italiano (1971) de Dino Risi, con Vittorio Gassman, El proxeneta y la testigo (1971) de Franco Giraldi, con Monica Vitti, La audiencia (1972) de Marco Ferreri, Queremos los coroneles (1973) de Mario Monicelli, El amargo deseo de la propiedad (1973) de Elio Petri, La gran comilona (1973) de Marco Ferreri, con Marcello Mastroianni, Michel Piccoli, Philippe Noiret y Andréa Ferréol, Apasionada (1974) de Mario Monicelli, con Ornella Muti y Michele Placido, No tocar a la mujer blanca (1974) de Marco Ferreri, con Marcello Mastroianni, Catherine Deneuve, Michel Piccoli y Philippe Noiret, Habitación para cuatro (1975) de Mario Monicelli, Pato a la naranja (1975) de Luciano Salce, con Monica Vitti, La carrera de una doncella (1976) de Dino Risi, con Agostina Belli, ¿Quién se acuesta con mi mujer? (1976) de Tognazzi, con Edwige Fenech, La alcoba del obispo (1976) de Dino Risi, con Ornella Muti, ¡Que viva Italia! (1977), film de episodios dirigido por Monicelli, Risi y Scola y protagonizado por Vittorio Gassman, Ornella Muti y Alberto Sordi, La chica del atardecer (1978) de Dino Risi, Vicios pequeños (1978) de Edouard Molinaro, con Michel Serrault, El gran atasco (1979) de Luigi Comencini, o Los viajeros del atardecer (1979), en la que volvió a dirigirse a sí mismo y a Ornella Vanoni. 
Entre sus trabajos de la siguiente década figuran entre otras La terraza (1980) de Ettore Scola, que aglutinó un gran reparto encabezado por él, Vittorio Gassman, Jean-Louis Trintignant y Marcello Mastroianni, La jaula de las locas (1980) de Edouard Molinaro, de nuevo con Michel Serrault, La historia de un hombre ridículo (1981) de Bernardo Bertolucci, por la que recibió el premio de interpretación del Festival de Cannes, Divórciate, amor (1982) de Marco Vicario, con Monica Vitti, Un quinteto a lo loco (1982) de Mario Monicelli, La jaula de las locas: ellas se casan (1985) de Georges Lautner, con Michel Serrault, o Ultimo minuto (1988) de Pupi Avati.
Su vida privada proporcionó abundantes crónicas a la prensa del corazón. En 1955 tuvo un hijo, Ricky, fruto de su romance con la bailarina inglesa Pat O'Hara. En 1963 se casó con la actriz noruega Margretha Robsam, con la que tuvo otro hijo, Thomas, y de la que se divorció tres años después. En 1972 contrajo nuevas nupcias con la también actriz Franca Bettoja, con la que tuvo dos hijos: Gianmarco y María Sole. Sus cuatro hijos se dedican al cine. Tognazzi falleció a los 68 años a causa de un derrame cerebral en una clínica de Roma, poco después del rodaje de La batalla de los tres reyes (1990), última película en que participó.


1 comentario:

  1. Un genio completo, el gran Ugo. Uno de los más grandes actores de la historia!!!!

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